La trampa.

1248 Words
Capitulo 1 Natacha, demasiado liberal de cuerpo casi perfecto, medidas 90—60—90, se había presentado a un casting, debía desfilar en ropa interior, cuándo todo comenzó, se fijó en él teléfono móvil, ahí decía se necesita señorita con grandes curvas, bonita de cara, para modelo profesional." Nosotros la preparamos", justo en aquél momento, estaba, con una amiga de nombre Aurora. Natacha, de dientes perfectos, ojos azules intensos, cara de muñeca Balbi.Al principio, cuándo se presentó, había un fila enorme de chicas, suplicando por aquel puesto, esperó media hora, cruzó por una puerta, estaba ansiosa, ella pensó, "Seré famosa, seguro voy a salir en todas las portadas." De tan solo 15 años de edad, dijo; a sus padres, qué tenía una entrevista laboral. —¡La qué sigue, por favor! — ¿Cuál es tu nombre? ¿medidas, peso? Una vez qué Natacha, le dijo todo respecto a su persona, la invitaron qué pase, a una sala qué estaba demasiado alumbrada, con grandes faroles qué alumbraban su hermoso rostro, de niña mujer, en cuánto entró había un fotógrafo. —Hola, pasa por aquella habitación y quédate en ropa interior. Ingenua, una chica de bien, sus padres de clase social alta, él sueño de ella siempre, había sido ser una modelo profesional, quedó en ropa interior, estaba nerviosa, subió por unos escalones, había un escenario qué atrás tenía cortinas, subió preocupada y avergonzada, aquel fotógrafo comenzó a tomar fotos, debía colocarse en diferentes posturas, accedió con tal qué la dejarán trabajando, luego de sacar aquellas fotos, aquel hombre de nombre Aldo, envío esas fotos a España, debían elegir la chica más linda y sensual. Natacha, aquel día, llegó contenta a su casa. —Madre, querida en la entrevista laboral, me a ido bien, me han tomado fotos, voy a ser una modelo. A los pocos días, aquel hombre la llamó por teléfono, atendió su madre. —Hola, buenos días ¿Usted es la madre ?, le informo; Su hija a quedado seleccionada, deberá presentarse lo más ante posible, en nuestras oficinas la esperamos. Aquella mañana, Natacha despertó entusiasmada, se levantó en pijama era de seda, en puntitas de pies, se acercó hacia la habitación, de sus padres, besó a su madre. —Madre, me tengo qué ir, vine a despedirme, al menos podrías decir, qué te valla bien hija, será él primer día de trabajo, me siento feliz. Él padre, la estrechó en sus brazos. —Hija, qué te valla bien. Natacha, puso su osito de peluche, adentro del bolso, regalo de su padre, de nuevo tocó la habitación de ellos, les dió un beso, emocionada, lista para irse, cuándo se acercó a su perro, qué tanto amaba, le movió la cola, puso sus patas sobre su pantalón. Natacha, cerró la puerta de la entrada de aquella casa, se llevó las llaves, justo en la esquina la esperaba, un vehículo, según ellos, eran de la agencia de modelos, subió confiada al vehículo, habían dos tipos más, con un pasaporte, y documento falso, la llevaron a un lugar oscuro, habían dos niñas, desde afuera, grita una de ellas, le colocan una venda en los ojos, la atan de pies y manos, es una trampa. Natacha, comenzó a temblar, no tenía idea lo qué estaba pasando, la trasladan a otro lugar, no podía ver, solo lloraba, la prepararon y la subieron a un avión, la llevaron a otro país, no tenía idea dónde estaba, la trasladan hacía un vehículo, qué dió muchas vueltas, sintió un ruido de voces, se halló, en un camino sin salida, estaba angustiada, había caído en una trampa, después qué él vehículo, diera miles de vueltas, se detuvieron en un lugar desierto, solo había, una sola casa, la llevaban, con dos más, le pusieron doble venda en los ojos, en un cuarto oscuro, se sentía llorar, a otras personas, qué venian de otra parte, una cama, qué estaba desaliñada, las paredes destruidas, era un sótano, con sus ojos llenos de lágrimas, pidiendo a Dios por clamor, por momentos su cuerpo, se sintió paralizado, en él silencio de la noche, de lejos se escuchaba aullar algún perro, comienzo del primer día dónde, recién daba comienzo, a la pesadilla en su vida. Natacha, durmió sobre aquella cama, atada de pies y manos, no podía gritar su boca está cubierta de vendas, de pronto escuchó un fuerte grito. —¡Déjeme, no quiero ir!, ¿usted quién es? Al parecer, llevaban aquella chica a otra parte, Natacha, sintió sobre su cuerpo, qué le picó algo, no podía moverse, solo llorar ante tanto terror, de la primera noche. Al día siguiente, despertó, sintió ganas de hacer sus necesidades básicas, no pudo sostenerse, sin poder orinar, estaba viviendo él peor de los momento de su vida, pasaron dos días, la tercera noche, sintió gritar a otra persona está vez con más intensidad, los gritos eran de gran clamor. —No quiero ir, ¿Adónde me llevan?¡Por favor! Llegó la cuarta noche, Natacha comenzó con fiebre, su cuerpo temblaba estaba sucio, al parecer al lado de ella se encontraba otra chica, comenzó a gritar, la trataban peor qué animales. —Vamos, tenemos preparada una sorpresa, para ti. —¿Qué van a ser conmigo? No quiero ir, ¡Odio este lugar! Se acercaron a Natacha, para hacer lo mismo qué las otras, estaba, casi sin respiración, no había comido, ni agua consumía, uno de ellos dijo: —¡ Está casi muerta!, debemos bañarla y luego qué la vea un médico, ¡Se nos muere!, Vamos. Natacha, está sin poder moverse, los tres hombres, la tuvieron qué trasladar de un auto, hacia otra casa, de uno de los delincuente. Enviaron a Mercedes, la mujer encargada de bañar, a todas esas chicas, qué llegaban de distintos países para hacer él trabajo, con ayuda de la cocinera, la pusieron en la bañera su pelo, estaba enredado, una vez qué la bañaron le secaron su cabello, cambiaron de ropa, apareció él médico, la instalaron en una de las habitaciones, cómo si nada hubiera pasado. —Hola ¿ Qué le está pasando a la chica? veo qué está totalmente desnutrida. — No sé alimenta bien, no quiere, comer. Mercedes, le mintió al médico. — Vamos, a ver qué hacemos. Él médico la examinó, controló presión y peso. —¡Deberá, tomar esta medicación! La deja con suero, la mantuvo en observación, con una enfermera, a los tres días, él médico volvió. Natacha, no podía moverse, antes de qué entre él médico, los delincuentes le prohibieron qué hable, estaba débil, pensando cómo escapar, sería muy difícil en casa de los matones, había gente armada, apenas pudo caminar miró, desde la ventana, hacia afuera, la casa rodeada de hombres de seguridad. El médico entró, hacia la habitación, qué se encontraba Natacha. — Hola querida, ¿Cómo estás ? no has comido nada, ni tomas agua, te voy a dar unas vitaminas. — La próxima semana, vengo a verte. —Se retiro del lugar sin decir, mucho más. Los delincuentes, enviaron a Mercedes, con la receta, a comprar los medicamentos, acostumbrados a la trata de personas. Natacha, apenas despertó miró la habitación, estaba rodeada de lujos, entró Mercedes. —Hola, ¿Cómo estás? —¿Qué van a hacer conmigo? — Lo qué hacen con todas las chicas, te enviaran con un médico cirujano, para qué te hagan, cirugía estética y en todo tu cuerpo, una cara nueva antes de enviarte, a trabajar. Mercedes, río a carcajadas.
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