- ... ¿Quieres casarte conmigo? – pregunta son una enorme sonrisa en su hermoso rostro. Mi corazón está desbocado de la emoción y mi voz parece que me ha abandonado. Pero respiro profundamente tratando de reponerme para responder. - Si – digo asintiendo con la cabeza mientras él se pone de pie para venir hasta mí y abrazarme. - ¿creí que te habías arrepentido? – digo escindiéndome en su cuello. - Nunca, solo quería que esto fuera especial e inolvidable para ti – responde separándose un poco de mí para que lo vea a los ojos. - ¿te casas conmigo? – su sonrisa me enamora y se acaba de convertir en mi favorita. - Si, si y mil veces si – respondo para luego besarlo confirmando con eso mi respuesta. Me abraza por la cintura pegándome más a s