Megan sonrió internamente. Por supuesto que iba hablar con el señor Walton y acusar a Noha de todos los atropellos que a sufrido a su lado. Correría a él para que el divorcio le sea concedido. Respiró ansiosa, fingió seriedad y fijó su mirada en la puerta del avión que poco a poco se iban abriendo. Vio salir a una pareja muy jovial. El señor Edwin era una persona atlética, de buen cuerpo y estatura alta. Su tez de color blanca que hacía combinación con los cabellos color azabache y ojos azules claros. Sonriente, carismático, pero misterioso a la vez. La señora, Dasha quien lo acompaña, mantenía siempre una sonrisa. Alta, delgada y de tez blanca. Los ojos eran grises y de cabellos castaños. Lucía carismática y dispuesta a razonar. Los señores Walton bajaron tomados del brazo y caminaron