Amigos con derechos

Capítulo 2

No me gustaba en la forma que se había expresado, se estaba burlando, ¿Cómo alguien tan lindo puede ser tan idiota? ¿Qué les puedo decir? Leo libros que me imagino a los protas como unos dioses y creo que por la guapura de Alessandro, lo idealice como si fuera un personaje ficticio.

Preparo mis dedos para teclear, esto lo hacía por los lectores, solo veía comentarios en dónde le decían lo lindo que es, otras preguntándole si tiene novia y muy pocas respondiendo a lo que verdaderamente va la publicación.

Cómo buena espectadora de libros, dejo mi critica para apoyar a aquellos escritores que nos dejan la mente abierta con escritos eróticos.

“La perversión es sólo otra forma de arte. Es como la pintura o el dibujo o la escultura. Excepto que, en lugar de pintura, nosotros los pervertidos usamos el sexo como nuestro medio de expresión”, comenté.

Me concluí porque lo sentí personal, no he escrito un libro, pero si leo. Sin más que decir, echo un reojo a mi alrededor y notó que el bus se aproxima, así que guardo mi celular.

Genial, no puedo creer que desperdicie tiempo escribiéndole a ese idiota cuando debí buscar alguna víctima de libro nuevo, ¿Por qué víctima? Porque nadie se salva de mis ojos.

Al menos espero que aprenda a respetar ese tipo de contenido, sea o no sea virgen, no puede venir a al grupo que yo estoy y criticar.

Ok, Sam, calma, te estás adueñando de algo que ni es tuyo. El bus se para en frente de mi, abre sus puertas y me subo en él, le doy mi ticket al chófer y me desplazo hasta encontrar un asiento vacío.

Vuelvo a sacar mi móvil y audífonos para escuchar música, el tiempo con música pasa rápido y llego a mi parada, bajo del bus y guardo mi celular en mi bolsillo, luego comienzo a caminar unas cuantas calles a la universidad.

Estudio literatura, pero había una cátedra que no me gustaba en absoluto, justamente esa la tenía a primera hora. Yo me levanto y tomo para no dormirme, pero esa materia logra que recupere el sueño.

Llegó a la universidad y paseo sin prisa, pues mi aula estaba cerca, mientras me dirigía a mi clase, pude sentir varias vibraciones en mi pantalón.

No lo mal piensen, no tengo aquellas bragas, realmente era mi celular, seguramente por las notificaciones, tal vez mi banda fav ha subido una canción nueva.

Saco mi celular de mi bolsillo y chequeo las notificaciones que hacen tanto escándalo.

Notificación:

“Alessandro ha reaccionado a tu comentario”

“Alessandro ha respondido a tu comentario”

Mi corazón se acelera, no puedo creerlo, ¿Así se siente que te responda por primera vez o siempre? Joder, contrólate, lo odiamos.

Por curiosidad toco la notificación del comentario y espero a que cargue gracias a mis datos.

“Interesante respuesta”, respondió él.

¿Interesante respuesta? ¿Pero qué carajos? Sabía que había malgastado mi tiempo, no era como lo esperaba que sería.

Ni siquiera se cómo reaccionar a eso, a la vez me choca que hasta suene tan interesante como para seguir detrás de él, pero no entiendo.

¿Qué quiere decir con interesante? ¿Es bueno o malo? No respondo su respuesta porque no sé que responder, de todos modos, habían otras cosas notificaciones que robaron mi atención.

Notificación:

“Alessandro ha reaccionado a tu foto de perfil”.

“Alessandro ha reaccionado a tu foto de portada”.

“Alessandro te ha seguido”.

“Alessandro te ha enviado la solicitud”, solicitud de amistad.

“Alessandro te ha enviado un mensaje ¿Eliminar o contestar?”, solicitud de mensajes.

Abro ligeramente boca por impresión, ¿La acosadora está siendo acosada? ¿Así se siente? No, no es lo mismo, a él lo siguen muchas chicas y yo… creo que fui la excepción.

¿Debería darle un poco de su propio chocolate? Tal vez, pero está oportunidad no si podría tenerla otra día. Mierda, ¿Qué hago? No quiero arruinarlo, pero tampoco quiero verme desesperada.

Ok Sam, no te adelantes a los hechos, no estás leyendo un libro… pero ¿Y si no le gustó el mensaje y me está reclamando? O está cansado de verme en sus publicaciones y simplemente quiere decirme que lo deje en paz porque tal vez ignorarme no fue muy claro para mí.

Reviso todo de nuevo, ¿No dije nada malo o si? ¿Por qué siento tanto miedo? Solo lee y enfrenta, ve para que te escribió Sam, solo así sabrás.

Mi dedo presiona a “contestar” y cuando el mensaje se abre, leo su contenido.

[07:45] Alessandro: Así que, ¿Sos una pervertida?

Creo que me asusté por nada, en parte estoy aliviada de que no es un reclamo y por otra parte estoy confundida, ¿A qué se debía esta atención? ¿solo por una respuesta a lo que pienso? ¿Hacia esto con muchas chicas?

Bueno, si me pongo a pensar en ello, me sentiré peor, pero me refiero a que primero las ignoras y luego te da esa atención que es poca, pero con la que te conformas porque has idealizado a la persona.

Preparo mis dedos para responder, pero choco con alguien, eso me pasa por estar pendiente al mensaje.

Así de atrapada me tiene que no pensé primer en caminar y después revisar mis redes sentada.

Parece que la terapia de ignoración no funcionó.

—Disculpé...

Expreso muy apenada con la persona que tenía al frente, alzó la mirada y era mi profesor mirándome con severidad.

—Ya empezará nuestra clase señorita León, espero verla más concentrada. —Se cruza de brazos.

Asentí varías veces con timidez, guardo mi teléfono y entro al aula. No es que me la pasé distraída para que me hablara así, solo que es muy estricto, pero tanto me gusta la carrera que tengo buenas notas en todo.

Mi profesor es alto, trigueño, cabello castaño un poco canoso, tiene unos cincuenta años y es amigable, pero en su cátedra es muy estricto, fuera de la universidad era un amigo más para los estudiantes.

La clase empieza y me mantengo despierta, a pesar del sueño, no podía concentrarme pensando en una respuesta para Alessandro, tenía muchas dudas, pero quería mantenerme interesante.

¿Qué me pasa? ¿Por qué me vuelve tan loca? Él me ignoraba, debería tenerlo en la lista negra, ¿Dónde queda tu dignidad Sam? Mierda, pero es tan lindo que voy a guardar mi dignidad por hoy.

La clase termina y me siento un poco más atrás para que tener más privacidad en mi celular, siempre hacia eso cuando terminaba una clase, no salía o hablaba con alguien a menos que sea por la clase, solo me quedaba a leer libros o a hacer mi tarea, pero está vez, sería los mensajes de Alessandro

Saco mi teléfono nuevamente y veo otro mensaje de mi supuesto ex-crush superado.

[07:50] Alessandro: Usa el sexo en mí como nuestro medio...