“También es una obra que leí de niño, igual que la obra maestra de Twain, ‘Las aventuras de Huckleberry Finn’”, había dicho el abad. “También a mí me gusta ‘Huckleberry’, pero volviendo a Wells, en sus novelas consigue aunar armoniosamente fantasía, ciencia y humanismo, más que Verne y yo diría que mucho más que el mismo Twain de ‘Un yanqui...’, que por cierto lanzaba ironías contra la sociedad ya tecnológica de su tiempo, desde la que el protagonista se ve transportado al Medioevo y en el que acaban apareciendo técnicas anacrónicas y por tanto desastrosas. Las obras de Wells son más complejas. Son ejemplos de ciencia ficción filosófico-social y esta ha sido, o mejor dicho, viéndolo desde este 1933, será en el futuro el objetivo de la mejor ciencia ficción, que se convertirá en tema de la