—¿Era necesario ser tan asqueroso?— Pregunta la castaña, cuando ya estan arriba del auto, camino a la oficina de ella. Él levanta los hombros. —No sabe hacer bien su trabajo, Wood, bastante que me controle... ¿Y el es el gerente?— Sisea burlón. —Hay personas que tienen que trabajar un domingo como hoy, y te aseguro que no es grato que venga una cara amargada como la tuya a hacerles el día y el trabajo complicado... Podrías haber puesto un poco de voluntad, ya qué nadie te obligó a venir...— Contraataca la castaña. —Cuando necesite que defiendas a uno de mis empleados te voy a tener en cuenta... Porqué siempre defendes lo indefendible, Wood... Sos una experta en rescatar empleados...— Suelta siseando y prendiendo la radio... Busca en su memoria y coloca directamente muse... Bien bajo,