Era muy tarde, había oscurecido, casi todo el edificio estaba con las luces apagadas, excepto por unas cuantas oficinas, incluyendo la de Nicole. Patrick lo sabía porque de tanto tiempo esperando desde afuera del edificio, él ya había contado los pisos y las ventanas de las oficinas, así que ella seguía trabajando. Nicole le había enviado un mensaje, le había dicho que no pasara por ella, pero él quiso hacerlo, sintió que algo salió mal en el almuerzo y quería arreglarlo, aunque no sabía exactamente lo que era. Luego de muchas horas esperando en la salida de la empresa, Patrick no aguantó más y decidió subir. Nicole seguía con la puerta de la oficina abierta y parecía una hormiguita en su escritorio, tecleaba en la computadora, volteaba hacia unos archivos a un lado, se giraba para rev