CAPÍTULO DIECINUEVE
Thor se sentó con los otros miembros de la Legión y Krohn, sobre el suelo en su improvisado campamento, en la cima del acantilado, la fogata rugiente hacía poco para repeler la oscuridad de la noche. Docenas de ellos se sentaron espaciados alrededor de ella, todos agotados, mirando sombríamente a las llamas. Thor miré hacia atrás y vio el cielo iluminado con miles de estrellas, rojas, amarillas y verdes, colocadas de tal manera que Thor no había visto nunca antes en esta parte del mundo. El fuego crujía, pero fuera de eso, la noche era silenciosa.
Todos ellos habían estado sentados ahí durante horas, congelados con agotamiento, reflexionando sobre su destino después de esta agotadora jornada de capacitación. Thor, especialmente, estaba lastimado por su encuentro con e
