El chofer llegó faltando 30 minutos para la media noche. Ashley tomó su equipaje y bajó en seguida.
Saludó al chofer y entró en el coche. Él arrancó y la llevó hasta el aeropuerto, sólo faltaba Ashley para que el avión despegara.
Alexis la vio salir del coche y se alegró internamente. La tomó de la cintura y subieron juntos al avión privado de empresa.
Ashley notó lo elegante y caro que era el avión por dentro, hasta sus asientos eran cómodos y tenían una piel muy suave, pero aun así estaba aterrada.
- Iré a dormir, debería de hacer lo mismo – dijo Alexis caminando a su gabinete.
- Me quedaré aquí, quiero ver el cielo cuando sea de día – respondió Ashley sentándose en uno de los asientos.
- Como quiera – dijo cerrando la puerta.
El avión empezó a despegar y Ashley enterró sus uñas
