No sé si se debía a él y mi trabajo no era gran cosa, era casi como cualquiera de los técnicos, un rostro detrás de la cámara, obviamente donde el lente no enfocaba, no es que menospreciaba mi trabajo ni nada por el estilo, solo que ¡¿para qué me compré más ropa?! ¿Fue por él…? Hugo. Desde que me dijo que seríamos compañeros, no dejaba de ir arreglada al trabajo, aún sin saber cuándo él se iba a incorporar o…si estaríamos en el mismo horario. Aquello seguía siendo un caos, ahora que sabían cuáles eran los tres grandes que se nos unían, muchos querían estar en sus equipos, pero todo no sería posible. En unos minutos iban a colgar el anuncio de dos nuevos programas que se iban a añadir y el equipo por el que estarían conformados. Yo, que solo traducía, no tenía ni que mirar la hoja, p