Encontrando a su Verdadero Alfa

Preguntas

Príncipe Mason

Ashlyn se quedó dormida en el sofá antes de que terminara la película. Tenía su trasero acurrucado en mi cadera y solo quería ser su cucharón grande. Cuando la película terminó, Liam la apagó.

—Entonces… —Brandon comenzó—. ¿Nos vas a decir quién es Ashlyn y por qué es nuestra nueva compañera de cuarto?

—Ella era la futura Alfa de la manada Lago Esmeralda —les dije.

—¿La manada que desapareció hace más de nueve años? —preguntó Liam.

—Sí, esa misma. Supongo que nuestros padres eran amigos. Mi padre también pensaba que ella se había perdido. Por eso la recepción le alertó sobre el apellido Knight.

—¡Eso es una locura! —exclamó Liam—. ¿Cómo sobrevivió?

—No estaba allí. Estaba visitando a su tía en la manada Luna Azul. Y su tía la ha estado criando desde entonces —expliqué.

—Entonces, ¿ya la habías conocido antes? —preguntó Brandon.

—En realidad, sí. Supongo que nuestras madres eran grandes amigas, y pasamos mucho tiempo juntos en nuestra infancia, aunque no lo recuerdo. Pero sí recuerdo una barbacoa a la que fuimos en su manada. Fue aproximadamente un mes antes de que la manada desapareciera. Justo había cumplido once años y ella todavía tenía ocho. Estábamos jugando juntos en el lago. —Les pasé la foto que Ashlyn me mostró.

—Todo esto es demasiado loco. ¿Es por eso que tu padre nos pidió que la protejamos? —interrogó Brandon.

—No estoy muy seguro de eso, pero estoy seguro de que está preocupado por su seguridad. Creía que sus mejores amigos habían desaparecido y también su hija. Creo que se sentiría mejor si uno de nosotros siempre estuviera con ella. Creo que, desde la perspectiva de mi padre, es mejor que esté a salvo.

—Tiene sentido —comentó Liam.

—De acuerdo, vamos a dormir. Mañana tenemos mucho por hacer —les dije.

Me levanté y me incliné para recoger a Ashlyn y llevarla a su cama. Estaba durmiendo pacíficamente y se acurrucó contra mí cuando la tenía contra mi pecho. Me encanta sentir su cuerpo en mis brazos y contra mí. Podía sentir las chispas donde mis manos tocaban su piel y su aroma a lluvia floral era intoxicante. La acosté en su cama y me costó dejar su habitación.

—Thor, ¿qué está pasando? —le pregunté a mi lobo mientras me preparaba para dormir.

—Mason, no estoy seguro. He estado tratando de hablar con su lobo, pero no puedo. Es como si hubiera una barrera. Puedo verla, pero ella no puede verme ni escucharme.

—¿Tal vez es debido al vínculo de pareja que tiene con otra persona? —le pregunté mientras estaba acostado en la cama, mirando el techo.

—No creo que sea el caso. Puedo hablar con otros lobos. El vínculo se trata más de emociones. Si ella fuera nuestra pareja, sentiríamos sus emociones y ella tendría un aroma ligeramente único. Uno que todos podrían identificar, pero luego habría un aroma subyacente que solo su pareja podría oler.

—Entonces, ¿qué crees que está pasando? —le pregunté.

—No estoy seguro. Tal vez preguntarle a Brandon y Liam cómo huele para ellos. Si es diferente, tendremos que hablar con tu padre al respecto.

—De acuerdo, les preguntaré por la mañana—.

Me acosté en la cama, pensando en la última vez que vi a Ashlyn. Fue hace mucho tiempo, pero después de verla hoy y la foto, empecé a unir los recuerdos. Era un día caluroso de verano y todos los adultos estaban sentados en el patio. Ashlyn quería ir a nadar, pero nadie más quería, así que fui con ella. Ella era divertida y juguetona y recuerdo haberme divertido mucho ese día con ella. Incluso después de haber terminado de nadar, pasamos el resto del día juntos. Recordándola, no pasó mucho tiempo antes de quedarme dormido.

Era temprano en la mañana cuando sonó mi despertador. Gruñendo, apagué mi despertador y luego me dirigí a mi baño para ducharme. Después de haber terminado de arreglarme, encontré a Brandon y Liam en la cocina.

—Alfa —me saludaron.

—Buenos días, chicos. ¿Ashlyn aún no se ha levantado? —pregunté, mirando a mi alrededor.

—Todavía no —respondió Brandon.

Tomé asiento en la mesa. Brandon me trajo una taza de café y luego se sentó con la suya. Liam ya estaba sentado en la mesa.

—¿Cómo huele Ashlyn para ti? —pregunté rápidamente y luego di un sorbo de café. Necesitaba una respuesta, esto no era normal. Las parejas generalmente se huelen y se reclaman en cuestión de minutos después de conocerse.

—Huele a flores, floral. Creo que hay un olor a tierra también —respondió Liam mientras jugaba con su teléfono.

—¿Por qué? —me preguntó Brandon. Me miraba por encima de su taza, probablemente tratando de ocultar su sonrisa. Me alegra que Liam estuviera solo jugando en su teléfono y no prestando atención.

—Nada —le dije mientras tomaba otro sorbo de mi café.

Me miró fijamente pero no dijo nada. Odio lo mucho que ese hombre me conoce a veces. Terminé mi café y puse la taza en el fregadero.

—¿Liam?

—¿Sí, jefe? —preguntó mientras levantaba la vista de su teléfono.

—Brandon y yo iremos a todas las reuniones esta mañana. Tú puedes quedarte con Ashlyn. Tráela a la clase de entrenamiento por la tarde —le dije.

—¡Sí! —susurró Liam.

—Ustedes dos pueden alternarse cada mañana —les comenté a ambos.

—¿Y tú? ¿No quieres tener un turno, Mason? —Brandon preguntó mientras movía las cejas y le envié un mensaje mental.

—¡Cállate y sube al jodido ascensor!

Me saludó con un saludo militar y retiró su taza. Ambos nos dirigimos hacia el ascensor.

—Liam, ¿recuerdas lo de la clase? —le llamé.

—Sí, jefe. Estaremos allí —gritó desde la mesa.

El ascensor sonó y las puertas se abrieron. Brandon y yo entramos, y él presionó el botón “M”.

—Entonces, ¿vas a decirme de qué se trata todo esto? —preguntó.

Suspiré y me recosté contra la pared. Crucé los brazos sobre mi pecho. Le envié un mensaje mental para asegurarme de que nadie más estuviera escuchando. Teníamos cámaras en los ascensores y lo último que necesitaba era que alguien leyera mis labios sobre el futuro rey que había encontrado a su pareja.

—Ashlyn no huele de la misma manera para mí que para ustedes.

—¿Y qué significa eso? —me respondió mentalmente. Ahora me estaba mirando. Encogí los hombros—. ¿No lo crees? —preguntó en voz alta.

—Tendré que preguntarle a mi padre —le dije, mientras lo callaba. No quería que se supiera que podría tener una pareja.

El ascensor sonó y las puertas se abrieron al vestíbulo principal. No podía quitarme la sensación de que debería ser yo quien se quedara con ella. No puedo simplemente abandonar mis deberes como Príncipe Alfa, pero sentía esta necesidad de estar con ella. Y alejarme de donde estaba, hacía que mi corazón gritara que volviera. Sentía que me faltaba una parte de mí.

—Mason, creo que ella es nuestra pareja. No huele igual para nosotros. Y también siento este tirón, esta necesidad de estar con ella y su loba. No estoy seguro de por qué, pero necesito protegerla —añadió Thor.

—Lo averiguaremos. Le preguntaré a mi padre al respecto. También podemos ir a la biblioteca para investigar sobre el tema. Solo tenemos que superar estas reuniones primero.

—Eso solo te toca a ti, amigo. ¡Es hora de la siesta! —Movió su cola y se adentró en el fondo de mi mente.

Genial, ahora a superar esta mañana.