CAPITULO 3
BASTIÁN
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Al día siguiente Salí de la ducha para prepararme a encontrarme con mi abuelo, mis ojos se encontraron con la caja de madera blanca que me había entregado la noche anterior Mila, sonreí acercándome aquel instrumento, abriéndola me encontré con el dinero perfectamente ordenado y una cadenita con una pequeña cruz sobre un papel que decía «suerte B. » me lance en la cama frotando mis manos sobre la cara repitiéndome.
—Concéntrate Bastián —me lo repetía una y otra vez como si el mundo me cayera encima cuando ella estaba en mi vida.
Termine de arreglarme y maneje hasta el restaurante donde pude ver a ese viejo que tanto amaba sentado con su periódico y un wiski en su mano derecha moviendo el hielo con su dedo índice. Me acerque sigilosamente tapando sus ojos y plantando un beso en la calva dibujada en su cabeza.
—Eres un ingrato ¿sabías?, me entere por terceras personas que estabas en la ciudad. Tu abuela te odia.
—Me amara con locura en cuanto me vea.
Él se levantó y se acercó a darme un caluroso abrazo y dos besos en mis mejillas
—¿Qué haces para estar tan guapo?, tu abuela ya le parezco viejo.
Sonreí porque ese viejo era el hombre con el mejor sentido del humor.
—Ese viejo Stan no sabe mantener su anciana y arrugada boca callada —refiriéndose a su amigo multimillonario.
—Me siento ofendido por ti —señalándome con su dedo —. Buscas inversionistas lejos de la familia ¿Por qué?.
—Quiero lograr esto por mis propios medios, sin la ayuda de las personas que aun sabiendo que es un fracaso me darán inversión por nuestros lazos.
—Eso no me incluye. Sabes que si veo fracaso en un negocio huyo.
—Lo sé, pero eres mi abuelo soy tu nieto favorito y harás una excepción —sacando mi iPad con todo el proyecto.
Lo primero que leyó fue el nombre del safari “EL CORAZON DE UN ANGEL” miro mi rostro a través de sus lentes dibujando una sonrisa en su rostro, podía ver como se empañaban por contener sus lágrimas.
—Tu hermano siempre dijo que harías grandes cosas en los negocios, ¿Por qué tan lejos?
—Es un lugar mágico, no me alejo de ustedes por mi pasado lo hago por mi futuro, realmente creo en esto y es todo mío abuelo, quizás mañana fracase pero tengo la certeza de que triunfare.
—Yo también la tengo —escuchando esa dulce voz que me arrasaba por dentro. Voltee encontrándome a mi abuela con su traje n***o en protesta por mi silencio estando en la ciudad —. ¿Te vas a quedar allí sentado mirándome? O te levantaras y le darás un beso a tu abuela.
Me levante con rapidez no sin antes recibir una bofetada con su cara seria.
—¿Cómo te atreves a pisar la ciudad sin llamarme? —abrazándome con todas sus fuerzas.
—No quería que tu presencia me distrajera, eres muy guapa.
—Y arrugada —musito mi abuelo.
—Aun así me amas —volteando sus ojos.
—Con toda mi vida —besando su mano.
Ella rodo el iPad mirando mi proyecto con una ilusión que desbordaba orgullo, saco de su lujosa cartera negra su chequera rápidamente puse mi mano sobre su bolígrafo.
—Por favor no hagas esto, busco inversionistas.
—¿Acaso no puedo ser la socia de mi nieto? —apartando mi mano, timbrando una cifra millonaria.
—Eres el ser humano que más amo en este mundo, confió tanto en ti que te daría hasta mis costosos zapatos para que cumplieras tu sueño. Incluso como te sientas en esa silla me demuestra que has cambiado ¡te amo! —acariciando mi rostro.
La abrace derramando par de lágrimas porque esa mujer había dado todo por mi hermano y por mí, aunque siempre la decepcione nunca dejo de confiar en que algún día haría lo correcto.
—Cuando pise NY me entere de lo que paso con Rodri, no quería que pensaran que vine a cagarle la vida.
—El cometió sus errores, al igual que tú le toca asumirlos. Quiere verte.
—¿Le has dicho que estoy en NY?. Eres una vieja chismosa.
—Respétame. Le conté a tu hermano porque la está pasando mal, te necesita.
Asentí besando sus suaves manos; moría de ganas de ver a mi hermano y además de darle un fuerte abrazo preguntarle ¿Por qué? Prometió hacerla feliz, jamás lastimarla y había destrozado su valioso corazón
REFLEXION DEL DÍA:
«CONSIDERA, que tu familia es tu hogar, tus personas favoritas, son con quien ríes y lloras, tu calma en la tempestad. Son todas esas personas que hacen que cada día de tu vida valga la pena»