Ya es martes, Gustavo a desayunado en el hotel se dirige muy temprano al ministerio, antes llamará a sus padres para decirles sobre su nuevo empleo, los padres de Gustavo han hecho esfuerzos para que su hijo pudiera estudiar en la universidad, la noticia los llena de mucha alegría, Gustavo les dice que el fin de semana los llamará nuevamente ya que estará toda la semana en el campo, luego llama a Fernando, todavía en la cama medio dormido lo felicita por el nuevo paso dado, le dice que a lo mejor se anima más adelante y va a buscar posibilidades de trabajo en el oriente del país. El joven se presenta en el campamento, sabe que el no pernoctará como su amigo Armando en algún campamento, el Ingeniero jefe se le presenta, su nombre es Javier Ferrer, es un hombre ya de cierta edad, Gustavo calcula que rebasa los cincuenta años, el campamento del ministerio no es ni parecido al de la empresa madera fina donde trabaja Armando, es muy sencillo y pequeño, tiene algunas camas para cuando de ser necesario pernocte algún técnico en el lugar, el ingeniero Ferrer le da las indicaciones a Gustavo, el básicamente cumplirá funciones de Ingeniero inspector, la empresa contratista le debe rendir cuentas al ingeniero inspector, deben llevar los datos de la áreas explotadas, cantidad de árboles sembrados, cantidad de madera en rolas llevada al aserradero, así como también la madera aserrada en forma de tablas y tablones que produce el aserradero de la empresa. Gustavo le debe reportar directamente al Ingeniero Ferrer, el al contrario de Armando no lleva puesto ningún tipo de uniforme, solo casco y botas de seguridad. A Gustavo le asignan inspeccionar el aérea donde se encuentra Belinda en el sector de Uveri, a Gustavo no le ha gustado para nada tener que inspeccionar el área donde se encuentra a cargo su ex compañera de estudio, sabe que es una persona problemática, aunque no tuvo tantos problemas con ella en la universidad como si los tuvo Armando, la noticia no le ha caído muy bien que se diga. Gustavo tiene un chofer a su disposición que de inmediato lo llevara al sector de Uveri, en ese sector se piensa explotar 400 hectáreas en un periodo de varios años. Gustavo es llevado directamente donde se está realizando la tumba de pinos, hay un gran movimiento de maquinaria y personal del consorcio Maderafina, Gustavo se baja del vehículo del ministerio, va al lugar donde se encuentra la ingeniera del Consorcio, el joven ya sabe que es Belinda Antúnez, ella al verlo queda completamente sorprendida, diciéndole:
--- ¡Hola Gustavo que placer verlo por acá!, me dijeron que vendría un nuevo Ingeniero del ministerio a inspeccionar nuestro trabajo, pero nunca me imaginé que fueras tú, se estrechan las manos y el joven le dice:
---Pues si Belinda, el mundo es muy pequeño, fíjate ahora estamos aquí nuevamente. Ella le dice:
---Bueno, espero que nuestra relación acá sea de lo mejor, Gustavo le dice:
---Seguro que si amiga, mientras tu empresa cumpla con las exigencias del Ministerio Ambiental, de seguro no habrá ningún tipo de problemas, luego conversan un rato, ella le dice que Armando Klasen también trabaja en el consorcio donde ella lo hace, Gustavo le dice que juntos viven en un hotel del centro de la ciudad, él le comenta sobre el accidente de Fernando Berti meses atrás, ella no sabía nada al respecto, lamentó ese incidente ocurrido a Fernando, Belinda le dice a Gustavo:
---Bueno amigo, luego seguimos poniéndonos al dia con asuntos de nuestra época de estudiantes, vamos para mostrarte el lugar, le iré indicando de las labores realizadas esta semana, se montan en un vehículo de doble tracción, completamente nuevo, ni parecido al que le asignaron a Gustavo por parte del ministerio, Belinda conduce por las diferentes áreas de la concesión, primero van al vivero donde se está produciendo el material para las nuevas siembras de pino, se bajan en el lugar, hay un gran número de personal, hay un Ingeniero del consorcio encargado de esas labores, Belinda los presenta, dan una caminata por vivero, el encargado le explica algunas cuestiones técnicas a Gustavo, al rato parten por el camino hacia el patio de rolas, es el lugar donde se apilan los troncos de pinos para luego ser trasladados al aserradero, descienden del vehículo, Gustavo que sorprendido de la gran cantidad de troncos de pinos que hay en lugar, en algún sector se le pierden de vista, no puede ver el final de la pila de troncos acomodados muy ordenadamente por las maquinas del lugar, en esa área el encargado es un Perito Forestal, lleva el control de la madera que entra de la explotación y la que sale para ser aserrada para convertirla en tablas y tablones. Los jóvenes del lugar se dirigen hacia el aserradero, todas las vías que transitan son arenosas, las vías están en muchos caos repletas de acículas, que son las hojas de los pinos, su forma es como de grandes palillos mondadientes, su acidez al caer al suelo no deja que nazca mucha hierba, por eso es que generalmente cuando vemos plantaciones de pino, en el suelo prácticamente no sale ningún tipo de hierba.
Se encuentran en el aserradero, es un gran plantel industrial, Gustavo sigue sorprendido de todo lo que ha visto solo el primer dia de trabajo, el vigilante baja la cadena para que ingresen, el hombre pide la credencial a Gustavo, el joven le enseña su carnet del ministerio y el hombre baja la cadena para que la pareja ingrese al aserradero, el aserradero se encuentra muy cerca de la vía principal que conduce a Santa Cruz y a otras ciudades cercanas a donde es trasladada la madera en grandes gandolas a los diferentes centros de distribución. Desciende del auto, Gustavo logra observar que en la planta hay hasta cuatro líneas de producción, hay muchos trabajadores en el lugar con sus uniformes y todos los equipos de seguridad respectivo, él sabe que parte de su trabajo entre otras cosas es velar porque el concesionario cumpla con las normas de seguridad exigidas por el ministerio del cual ahora él es funcionario, Belinda y Gustavo ingresan a la oficina del Ingeniero Torrealba, él es el jefe del plantel industrial, en el campo no hay tantos protocolos como en la sede principal del concesionario allá en la ciudad de Santa Cruz. Belinda le presenta a Gustavo al hombre encargado del aserradero, los tres hacen un recorrido por la planta, ya Gustavo como estudiante estuvo de prácticas en un par de aserraderos en la ciudad de San Fernando, pero esos aserraderos no se parecen ni de lejos a este gran aserradero con gran cantidad de maquinarias modernas, además de tener un gran patio con gran cantidad de madera depositada y de empleados laborando. Se despiden del hombre, mientras Belinda conduce de vuelta al lugar donde Gustavo dejo su auto doble tracción, este le pregunta a la joven detalles de los procesos de la empresa concesionaria, ella le despeja algunas dudas a su amigo. Belinda y Gustavo se han separado, ella es la encargada de la explotación en el sector donde se en encuentran Uveri, la concesionaria tiene en cada área un encargado, en cambio Gustavo como Ingeniero Inspector del ministerio debe inspeccionar todas las áreas el solo, debe reportar directamente al jefe de campo del ministerio el Ingeniero Javier Ferrer. Gustavo, aunque es un joven de retos, se encuentra algo preocupado ya que la responsabilidad que le han encomendado le parece a él, es muy grande.
La semana transcurre con mucho movimiento para Armando y Gustavo, los jóvenes no coinciden ya que Armado esta encargado de la explotación de pinos en el sector Centella, y Gustavo es el inspector del Ministerio Ambiental pero del sector Uveri, la concesionaria tiene asignados esos dos sectores por un periodo de cinco años, apenas van comenzando el segundo, los terrenos donde está asentada la gran plantación de pinos es propiedad del estado, por eso es que a través de las inspecciones del ministerio ambiental el gobierno hace cumplir la normas exigidas a la concesionarias. Hay un total de ocho empresas concesionarias en la vasta zona plantada de pinos, y hay aún más área para asignar a unas cuantas empresas más, por eso es que Gustavo y Armando siempre quisieron venir a buscar empleo en esta región, saben del gran presente y futuro de los Ingenieros Ambientales en este lugar.
Ya es viernes, Armando va camino a la ciudad en el transporte de la compañía junto a muchos más, van seis modernos camiones repletos de personal de la empresa, Gustavo en cambio el dia viernes se quedó en la oficina del ministerio en labores administrativas, por lo general los ingenieros inspectores del ministerio no van todos los días a la semana al campo, lo intercalan con labores administrativas en las oficinas ubicadas en Santa Cruz.
Los amigos ya se encuentran juntos en el hotel, tienen mucho material de que hablar, es viernes y Armando invita a su amigo para ir al lugar donde fueron el viernes pasado, le dice que a lo mejor Sara va a ese sitio también, Gustavo riéndose le dice a su amigo:
---Amigo, aquí como que usted tampoco quiere perder el tiempo, Armado sin reírse le contesta:
---Gustavo, esto es otra cosa, es otro nivel, yo por esta mujer iría hasta el fin del mudo, ambos se ríen a carcajadas mientras salen de la habitación muy acicalados y perfumados.