La luz de afuera me estaba dando en toda la cara, maldije para mis adentros, me estaba poniendo nerviosa la maldita luz, por lo que decidí levantarme y correr la cortina, volví a la cama y me tumbé pero ya no pude conciliar el sueño. En eso noto como algo pequeño entra en la habitación, y sube a mi cama, era un pequeño pastor alemán, no sabía que Jason tuviera perros, ya que anoche no vi ninguno. -Hola amigo-le cojo en brazos-Pero que haces tu por aquí, y como puedes ser tan guapo¿Tienes nombre? Salgo de la cama con el perro en brazos, dios mío no os hacéis una idea de como amo a los perros, siempre quise tener uno , pero nunca pudimos puesto que mi padre era alérgico. Bajo las escaleras con el perro en las manos y nada más bajar me veo a Jason hablando con alguien , el chico de espaldas