El gran SUV n***o se desliza silenciosamente sobre el asfalto en el camino cubierto de árboles. El grupo suele volar, pero apenas vale la pena el esfuerzo de llegar al aeropuerto. Leilani mira por la ventana al gran lobo rubio dorado y al gran lobo chocolate que corren junto al automóvil, justo fuera de la vista. Hudson y Finlay no pueden contenerse y necesitan liberar algo de su exceso de energía antes de llegar a la manada Media Luna y potencialmente golpear a Gabriel en la cara antes de que se diga una palabra.
Los cinco chicos parecen estar más tensos que Leilani.
Lani gime mientras mira a Madden, que está sentado a su lado. Presiona el botón para bajar la ventana.
—No lo estás.
Leilani simplemente sonríe.
—Observa.
Se quita la ropa y sale por la ventana abierta antes de que Madd
