Hoy es un día, para mi, desesperante. No alcanzo a entender casi nada de lo que hablan los chicos, pero insisten en que escuche y aporte lo que pueda.
Pasamos un par de horas armando cada uno una mochila con cosas que podríamos necesitar para varios días. Yo no tengo nada propio pero fueron muy amables de prestarme lo que necesitaba.
Luego pasamos cada uno completando una pizarra con datos importantes y fotos para ponerle caras a los nombres, algunas de esas caras las recuerdo del único dia que vi personas, cuando me secuestraron. Otras fotos son de mis padres y Marcus y algunas fotos de Amelia y las cosas que me heredó.
Luego en un descanso para comer algo Nick me mostró papeles para explicarme los movimientos que hizo en mis cuentas, los saldos y documentos de bienes, firmé todo de acuerdo y ahora todo me pertenece pero bajo otro nombre para ver mas adelante qué hacer.
Mi nuevo nombre es Samuel Johnson, si, nos pareció gracioso en ese momento mi nombre más largo y de apellido el nombre de John más largo, definitivamente somos unos niñatos.
Luego estamos aquí, cargando 2 camionetas gigantes y para nada olvidables a la vista, con todas nuestras cosas y las armas que, era sumamente necesario según Pedro que todos llevemos.
La idea es ir a armar una base en algún lugar en el bosque alrededor de la mansión de mi hermano y observar los movimientos para encontrar el momento justo y entrar.
No hay otro plan de acción.
Derribamos los obstáculos para entrar, derribamos más obstáculos para encontrar a Marcus, lo tomamos, seguimos derribando obstáculos y salimos, pasamos por el campamento y de ahí a los vehículos y partimos en viaje hasta algún otro lugar de los chicos para torturarlo. Yo no quiero torturar a nadie, solo quiero hablar con él.
Espero que este plan sin planes sea seguro por que estoy que me cago de miedo. Ni hablar que todavía estoy super débil. Lo único que me da fuerzas es la mano de John en la mía.
Es increíble la confianza que tengo en este hombre hermoso, solo conociendolo desde hace días. Y me parece increible lo que los chicos están por hacer por mí. Ya los siento como mi familia.
Vamos en camino hasta la dirección de Mansión donde me tuvieron, yo no la recuerdo, pero John tiene el camino en su cabeza, el viaje va a durar más de 2 horas así que aprovecho a comer algo y tratar de descansar.
Kevin me presto su ipod para que escuche música, y cuando me lo dio más temprano llore y tuve otra de mis crisis, segun Nick es porque estoy recuperando cosas que asumí perdidas por mi inminente muerte.
Es impactante y terrorífico pensar en lo que viví y a lo que sobreviví hace solo unos pocos días. Y les debo todo a estos cuatro terribles.
En algún momento siento besos en mi cuello y me despierto por más y John está frente a mi sonriendo
-abajo cariño, llegamos. Cuando terminemos con esto podemos irnos de luna de miel
Me dice guiñandome un ojo, el sexi bastardo.
-la próxima vez que me despiertes así, te conviene continuar con más porque no me conoces enojado
Le digo fingiendo mi ceño fruncido
Escucho la risa de Kevin y me doy cuenta de que estoy haciendo un berrinche mas real que fingidi y me sonrojo como idiota. John me besa fuerte y duro, y apoyando su frente en la mía me dice
-te amo cariño, de verdad, entraste como un misil en mi vida y no quiero que te vayas nunca, vamos a pasar por esto hoy y luego vamos a hacer todo lo que tu quieras
Yo solo suspiro con mis ojos cerrados. Tomo fuerza de él, lo abrazo y abro los ojos.
Le beso los labios suavemente y le digo
-te amo John. Vamos
Estamos alejándonos de las camionetas, cada uno con su mochila. Los chicos van observando el camino para armar una base donde esperaremos el momento ideal para ingresar.
Van hablando en voz baja, de cosas que no entiendo, John me lleva de su mano, y de vez en cuando me da un apretón para bajarme a tierra. Admito que tengo la mente llena de pensamientos y siento que me pierdo.
Estoy muy nervioso, tengo miedo, por mí y por los chicos, me moriría si esos bastardos los lastiman por mí.
Llegamos a un pequeño claro entre los árboles y tenemos que avanzar casi arrastrándonos por el suelo porque ya se ve la casa pasando unos pocos árboles. No estoy seguro pero deben ser las 9 de la noche aproximadamente. La casa está rodeada de luces y a un lado se ven muchos autos.
Nos separamos abarcando varios metros cada uno detrás de un árbol o un arbusto. John se queda pegado a mi
-yo puedo esperar aquí si quieres, no vas a poder hacer nada cargando conmigo
-shh cariño. No me muevo de tu lado
Hablamos susurrando. La voz de John es profunda y la amo
-y si te hieren por estar conmigo?
Le hablo apretando fuertisimo su mano
-Sam, mi amor, mirame.
Estamos en esto juntos, nadie queda atrás, todos nos apoyamos. Estos tres locos son los hijos de puta más jodidos que podemos tener para respaldarnos. Estamos seguros. Tomamos a tu hermano y nos vamos. Es fácil. Es un idiota con idiotas adorandolo
-te amo. Ten cuidado por favor. No me dejes
Un ruidito nos hace mirar a la derecha y Nick nos hace señas de que es hora, más allá de Nick veo a Pedro y por último en línea a Kevin. Los veo mirarse con intensidad, se me estruja la garganta. No sé que haría si alguno sale lastimado por esto. Respiro hondo y hago lo que hace John.
Los cinco nos acercamos a la mansión, separados como por diez metros entre nosotros, con John llegamos hasta una esquina de la casa y nos paramos con la espalda contra la pared, él tiene dos armas en sus manos y yo trato de estar lo más concentrado en mi entorno que puedo. Miramos a ambos lados y avanzamos pegados a la pared, nos agachamos cuando pasamos una ventana, me asomo demostrando toda mi estupidez, y no veo a nadie dentro. Con una mano freno a john para que vea también, le hablo bajito
-podemos entrar amor, es una habitación vacía
-chicos encontramos una ventana abierta de un cuarto vacío, entramos
-Oki, comportense tortolitos
responde Kevin.
Revoleo mis ojos y trepo la ventana, John me sigue. Una vez dentro revisamos todo, y escuchamos si hay alguien del otro lado de la puerta. Mi hombre inteligente saca una tablet de su bolsillo y pasa por el agujero de la cerradura una manguerita y vaya sorpresa es una cámara
Miramos la imagen en la tablet. Muestra un pasillo vacío también
-chicos bajé a dos en la entrada principal, una vez dentro bajé 3 más. Debo decirles que son unos idiotas estos tipos. ¿De verdad es la pandilla con más poder en toda esta costa del país?
-Basta Pedro, ya sabes que eres el mejor y nadie puede contigo. Presta atención ahora por dios.
Kevin hablaba por el canal de comunicación que todos tenemos en un auricular, su voz tensa.
-mi turno, bajé 8 ya, y estoy dentro
Dice nick
-¿Y tu Kevin?
Pregunto
-estoy bajo un árbol fumando
Contesta con la voz algo estrangulada
-No te preocupes Sam. Lo tengo a la vista y puedo decir que solo con sus manos ha bajado a más de diez. Es como el puto John Wick
Dice nick con orgullo
-¿Están todos bien?
Tengo que preguntar por mis nervios
Tres sip se escuchan a la vez y John me sonríe. Abrimos la puerta para salir y con miedo avanzo. Caminamos por un pasillo lleno de puertas y mi amor hermoso controla cada una.
Cuando quiso simplememte abrir y entrar por la primera puerta tuvimos nuestra primer discusion, fue en silencio y con mucho seño fruncido, pero emocionante igual, nos besamos cuando llegamos a un acuerdo, me río mentalmente de lo tonto que suena esto en un momento tan peligroso. Ahora miramos dentro con la cámara antes de hacer movimientos estúpidos.
Pasamos 4 cuartos vacíos, llegamos a uno del que se escuchan voces. John golpea
¡¡¡El idiota está golpeando una puerta!!!. Me mira y me guiña
Se abre lentamente la puerta y John saluda a un tipo alto y calvo con un puñetazo en la cara, el tipo cae al suelo con un ruido sordo.
-que carajos?!
Se escucha un grito desde adentro
-hola hola Marcus
Dice john
Me quedo congelado. Mi hermano está ahí adentro. Diosss que voy a hacer.
-chicos lo tengo.
Dice John dando un paso al interior del cuarto con las dos armas arriba. Lo sigo agarrando su camisa como un niño asustado. En realidad estoy cagado de miedo. Tiemblo terriblemente.
-tranquilo cariño, es solo un imbécil mas.
-pero si es el seal que me robó
La voz de marcus suena más gruesa que la que recuerdo
-Venimos a buscarte Marcus. ¿Estás listo?
-quienes? Tengo la casa llena de tipos que te van a encontrar
-mmm cuantos tienes? Por que hasta hace cinco minutos llevabas más de 25 bajas
Las armas de john apuntaban firmes hacia delante
En mis oídos de escuchaban pasos, suspiros, golpes, risas, pero ni un solo disparo, aún
Lentamente suelto la ropa de john, me limpio el sudor de mis palmas en el jean y me paro junto a john, a la vista de mi hermano.
-hijo de puta.
Dice Marcus apretando los dientes.
-Hola Marcus. Tanto tiempo. Tenemos algunas cosas que hablar hermano
-Yo no soy tu hermano pequeña mierda. Deberías estar muerto, tú me arruinaste la vida
-yo? ¿Qué te hice Marcus?
-niños niños, por que no vamos a dar un paseo mejor? Kevin dice detrás mío
Marcus está congelado en su sitio. No ha movido ni un músculo desde que me vio. Un brazo de Kevin me rodea por los hombros y me siento más relajado.
-¿no tienes más chicos Marcus?
Esperaba que fuese más divertido
Se escucha la voz de pedro con un tono de aburrimiento exagerado
-jodanse. ¿Quiénes son ustedes?
-somos la familia de este travieso
Dice Nick dándome una palmadita en la espalda
-que quieren?
-tenemos que hablar marcus.
Le digo tranquilo.
-Yo no tengo nada que hablar contigo. No te diste cuenta? Te tuve acá en mi casa durante un mes y no te dije una palabra
Siento una lagrima en mi mejilla
-Eres un bastardo. Estas loco
Un ruido fuerte me hace saltar. A la vez que Nick se queja
-jodido estupido, de donde los sacas marcus? Haces un casting buscando al más idiota?
-mierda, de verdad mataron a todos?
-yo todavía no maté a mi objetivo
Dice John con un chasquido
-vamos cariño, salgamos, por favor
Mi voz ya casi no se escucha, estoy ahogado.
-Estoy entrando en crisis
-Pedro
Dice John mientras me abraza fuerte y comienza a respirar profundo para que lo imite.
-respira cariño, estás a salvo. No hace frío, ahora me tienes para abrazarte cada vez que quieras.
La voz baja y profunda en mi oído me tranquiliza al punto que parezco una gelatina, si no fuera por los brazos que me sostienen estaría en el suelo.