Capitulo 31

1164 Words
Aixa también estaba molesta conmigo, por todo lo que sucedió. Así que respondío: "Esta bien, dejaré de comportarme como una niña, ya no te haré escenas de celos. Ahora, ¡su majestad! me retiro a desayunar". Yo sonreí al verla burlarse y asentí. luego bajamos a que ella desayune. Los dos estábamos molestos, asi que nos fuimos, uno atras del otro. sin mediar palabras. Al llegar a la sala. Máx y Jack, seguían aqui. ellos estában molestos por aceptar la petición de las chicas. Al verme. Máx se quejó: "Pául no puedes aceptar a Alice nuevamente, acaso el encierro te volvió loco". Jack también se quejó: "Máx tiene razón. no puedo imaginar que vuelvas a tener sexo con Jade". Yo sonreí al oírlos, no podía creer las tonterías que decían. Pero debía seguir actuando. Jade y Alice querían ver sufrir a sus amados. asi que yo las ayudaría. Después de oírlos quejar. me acerque tan rápido que Alice, se sorprendió. Luego acaricié su brazo lentamente y dije: "Esposa, creo que es hora de recordar viejos tiempos. Jade ven a la habitación con nosotros". Alice y Jade, se quedaron sorprendídas al oírme. no esperában que yo les pidiera sexo. Cuando ellas estaban por decir algo, yo volví a hablar: "Sultana crees que puedo estar con ellas, el resto del día. tal vez queden embarazadas, aún no inyecte mi anticonceptivo". Mientras Aixa se sorprendia. todos miraban con la boca abierta. Luego ella, sonrió y respondió: "Esta bien, puedes ir con ellas. son tus sultanas, asi que deben empezar a cumplir su rol". Al oir a Aixa, las dos se quedaron con la boca abierta. Luego Alice recupero, el sentido y gritó: "¡No!. Aixa cómo puedes pensar, que tendre sexo con él. ¡estas loca!". Luego de gritar agrego: "Pául no seas ídiota no volveré a estar contigo. sólo queria molestar a este ídiota. no creí que tu me aceptarías y mucho menos Aixa". Jade después de oir a Alice. dijo: "Pául no seas idiota, solo jugábamos con estos ídiotas". Al oírlas sonreí y respondí: "¡Lo se! Ustedes son muy predecibles. solo los ídiotas no lo notarían. Ya dejense de juego. - Lleguen a un acuerdo, las leyes no dicen que ellos, deben tener sexo con ellas. dice que ambos deben velar juntos, por el bebé y cuidarlo, hasta su mayoría de edad. En nuestras leyes eso seria hasta los 15 años. - Si ellos quieren tener sexo con ellas, ya no es mi problema. sí no llegan a un acuerdo separense. pero no vuelvan a meterse entre mis esposas y yo. ¡Entendieron!". Alice, se molestó al oírme y respondío: "Él quiere estar con ella. no llegaré a un acuerdo. me voy a separar de él. - Luego me marcharé con Vincent a vivir a otro lugar". Jade, pensaba igual que Alice. asi que dijo: "Es verdad, vamonos Wendy, prepara tus cosas nos vamos". Wendy después de oir a Jade, se quedó con la boca abierta. Vincent llego a mí y se abrazó a mi pierna. Luego dijo: "Papí yo no quiero irme, dejar tampoco a Pául y los demás, dile a mamá que se quede con nosotros". Al ver al niño, asustado casi llorando. me enfureci, quería golpear a Alice, por hacer sufrir a Vincent. Así que dije: "Chicas no voy a detenerlas. pueden marcharse si quieren. pero los niños se quedan". Ellas se molestaron al oírme. Alice fue la primera en quejarse: "No seas idiota, no voy a dejar a mi hijo. el se va conmigo". Vincent se puso a llorar, después de oirla. yo lo levanté y pregunté: "Jhon cual es el castigo, por no cumplir con la ley sobre los hijos en la orden". Todos estában boquiabiertos. nadie podia creer semejante escena. Jhon recobró el sentido y respondío: "El castigo por no cumplir con la ley, es la castración y el exilió donde su esposo, o esposa disponga". Yo sonreí y dije: "Bien, llama a Edward. dile que dos de mis esposa, no quieren cumplir con sus obligaciones. dile que sigan las reglas, y luego que las envíen a china a juntar arroz". Las dos se quedaron asombradas al oírme. los viejos empezaron a quejarse. Yo estaba molesto, asi que agarre mi arma. al verme, todos se quedaron en silencio. sabían que estaba enojado, y lo que les pasaría si seguian molestando. Jade salió del trance y dijo: "Pául no seas ídiota. ya te dije que no quiero ser tú esposa, solo fue para hacer sufrir a Jack. nosotras renunciamos a la orden. no puedes haer eso". Yo resople al oirla. dios sabe que quería usar mis armas en este momento. pero aún, asi mantuve la calma. Luego respondí: "Escuchen bien lo que voy a decir, no lo volvere a repetir. - Ustedes son mis esposas. no importa que renuncien a la orden, este es un juramento que jamas se romperá, hasta que alguno de nosotros muera, ¡siempre seran mis esposas!. - Casarnos fue un error lo se. yo no las quiero como esposas, ustedes tampoco a mí. pero tenemos hijos y no pueden irse de mi lado, hasta que ellos cumplan 15 años. - Pueden estar con Máx, Jack y los amantes que quieran, no me importa. pero no pueden apartarse de mi y los niños. ¡Les quedo claro!". Después de oírme. nadie dijo nada, todos sabían que no era él día, para molestarme. Wendy llegó junto a Jade y dijo: "Mamá no voy a dejar a papá. No es necesario que veas al tio Jack. ellos tienen una zona aparte en el palacio". Después de oírme y oir a Wendy. Jade respondío: "Esta bien me quedaré. pero diles que se vayan a su lugar. hasta que pueda asimilarlo". Alice vió a Vincent pegado a mí y dijo: "Te odió. pero me quedaré aquí, no ire a juntar arroz. tendre que soportar tu cara, por otros 10 años". Yo sonreí feliz al oirlas. no queria castrarlas y enviarlas a china. ¡Ohh si! pero los niños sufrirían si lo hacia. Luego ellas, se sentaron a desayunar. mientras todos bajaban la cabeza, para seguir en lo suyo. no querian que yo los viera y los regañe también. Máx se estaba por ir, cuando le disparé cuatro veces y a Jack junto a él. Todos se sorprendieron al ver lo que hice. Máx se quejaba por tener cuatro de mis estigmas en el cuerpo. Luego dije: "Jamas vuelvas a insultar a la madre de mi hijo. Ella no se revolcaba conmigo. estaba enamorada bajo los efectos del encierro y luego se caso conmigo. asi que ten mas cuidado con lo que dices". Máx estaba adolorido. pero asintió y dijo: "Lo síento. estaba enojado no quería insultarla". Jack sin embargo se quejó: "¡Ídiota! A mi por que me disparaste". Yo sonreí y respondí: "¡Lo síento! solo me entusiasme". Luego ellos se levantaron, como pudieron, y se fueron con sus esposas a recibir una inyección.
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