Estoy terminando el trabajo por hoy cuando escucho el grito de mi hija. —¡Papi! —Mi cuerpo se tensa y reprimo las ganas de salir de la biblioteca para abrazar a Demetrious. Eres tonta Brianna. Me quedo sentada en la biblioteca por un rato trato de concentrarme en finalizar mis pendientes del día, pero no puedo al saber que Demetrious está en casa. Alrededor de una hora después escucho que tocan a la puerta. Tomo un respiro profundo antes de hablar. —Adelante. Demetrious entra con una mirada seria en su rostro. Lo veo más sereno que esta mañana. —¿Interrumpo? —No. Ya estoy recogiendo mi desorden. Por hoy termine—balbuceo. Cálmate Brianna no tienes por qué sentirte así. Él fue el que nos engañó a nosotras murmura mi conciencia ¡Cállate! —Vengo de la habitación de Dylan—com