—¿Te pensas que haciendo este tipo de cosas vas a ganarte mí lugar?— su padre lo mira con desdén luego de la golpiza que le dió... Elian de tan solo 14 años sonríe irónico con sus dientes completamente llenos de sangre. —¡Yo no me necesito ganarte nada, porque es Claro que soy mejor que vos en lo que haces!— escupe mirándolo sin ningún temor. Su padre chasquea la lengua mirando a sus ayudantes, para con una seña de cabeza pedirles que se retiren inmediatamente. Los mismos accionan rápidamente su orden y el almacén en donde se encuentran queda desolado. Serkan, su padre, le da un golpe en su rostro con la ayuda de la culata del arma que lleva en la mano, pero aquello no era para nada una sorpresa para el castaño, estaba acostumbrado a los golpes de su padre y a salir ilesos de los mi