VII.- Alfas Posesivos

1362 Words
- Hablemos - le dijo Dylan girando para ver a Tyler, el cual parecía un cachorrito triste   - Se que debí de alejar a Breaden solo no quería ser grosero pero te lastime y eso no es justo, yo quiero estar contigo y solo contigo - le dijo con tristeza   Dylan soltó un suspiro, no podía decir que no con esa carita, su corazón se está derritiendo ante el rostro del alfa amargado Hale.   - Te perdonó pero no quiero que ella vuelva, no confío en esa perra dejando de lado mis celos algo no anda bien con esa mujer - dijo frunciendo el ceño al pensar en la mercenaria   - Creí que negarías tus celos pero dejando eso de lado ella no se volverá acercar aquí - le dijo Tyler esbozando una ligera sonrisa dando un paso para estar más cerca de su compañero   - Yo soy honesto Tyler Hale y siempre voy admitir que estoy celoso y más cuando perras como ella tocan a mi hombre - dijo Dylan haciendo un tierno puchero pero luego tomó a Tyler por la playera y lo estampo contra la pared mostrando sus orbes carmesí - Además si vuelvo a ver que no alejas a perras de ti también me encargaré de ti - esbozó una sonrisa aterradora que hizo temblar al alfa y no solo de miedo sino que esa faceta del castaño lo excitó demasiado    Dylan al ver lo que causa en el alfa sonrió como toda una diva y se alejó del azabache feliz al dejarle claro a ese alfa que era suyo y de nadie más.   - Eso estuvo intenso - dijo Mason, el cual había visto todo. Tyler lo miró alzando una ceja - ¿Qué? No planeaba verlos, yo solo quería un vaso de agua pero debo decir alfa que el chico tiene carácter, es mi nuevo ídolo   Tyler negó era su beta tenía razón, Dylan era de otro mundo, era alguien único y con un carácter bastante especial.   -------------------------------------------------------------------------------------------- El fin de semana había pasado rápido y Dylan se encontraba arreglando los últimos detalles de su uniforme, tomó su chaqueta con el logo de la comisaría color verde militar para bajar encontrándose a todos los de su familia.   - Pero que guapo se ve nuestro nuevo policía - dijo Kali dejando un beso en la mejilla del chico   - ¡Te ves genial! - le dijo Carver mientras que Max le guiñó un ojo   - Es mi hijo, ¿qué esperaban? - dijo Duke inflando el pecho con orgullo   - Rezábamos que no se pareciera a ti, gracias al cielo el cachorro salió guapo - dijo Ennis ganándose un trapazo en la cara de parte del otro   - Vamos dejen de pelear - dijo Dylan riendo mientras terminaba de comer su desayuno - ¿Nos vamos cachorros? - los gemelos asintieron   Los tres salieron de la mansión subiéndose al jeep del castaño, el mayor llegó al instituto donde los gemelos se bajaron.   - Tengan un buen día - les dijo Dylan, antes de irse saludó desde lejos a la manada Hale   Al llegar a la comisaría todas las miradas cayeron en él ya que había adoptado el apellido de Linden así que todos lo conocían como el hijo bastardo del sheriff con una mujer, para el pueblo era el resultado de un amorío que daño al sheriff así que la mayoría lo veía como si fuera algo asqueroso pero a él no le importaba mucho, él demostraría que no era esos rumores. Al entrar se acercó a Jordan que soltaba un suspiro mientras acomodaba papeles, Linden lo había emparejado con él así que desde ese momento sería compañeros en el trabajo.   - Buenos días Jordan - le saludó Dylan esbozando una gran sonrisa ignorando los comentarios de sus compañeros   - ¡Dylan! Buenos días - dijo sorprendidos, parecía que estaba perdido en sus pensamientos antes de que llegará - Oye, ¿crees que tu padre podría no dejar animales muertos en mi entrada? Casi me da algo cuando abrí mi puerta trasera la ver un venado muerto con algunas flores a sobre él - el castaño rió, ahora entendía el porqué la actitud del sabueso - Tranquilo, solo serán otros dos días. Mi padre ha empezado un cortejo y te está demostrando que puede alimentarte así que te llevará lo que cacé, deberías mandar a procesar la carne, Ian sabe con quién y luego puedes cocinarla y llevarle un poco a mi padre, claro si aceptas el cortejo   - Da algo de miedo pero respeto sus costumbres, quien diría que hay lobos que siguen haciendo eso - dijo Jordan negando con la cabeza pero una sonrisa adornaba su rostro   - Cuando encontramos a nuestro compañeros no los dejamos ir y más cuando somos alfas, es instinto, somos muy posesivos y una vez que tenemos a nuestra luna luchamos y jamás la dejamos ir a menos que rechacé aunque eso nos mataría - dijo con simpleza ante la atónita mirada de su futuro padrastro   - Básicamente tendré a tu padre detrás de mí, será muy posesivo - dijo Jordan soltando un suspiro, no le desagrada del todo, había sentido una conexión con Duke y él había sido un encanto - ¿cómo funciona contigo y Tyler? Ambos son alfas   - De algún modo mi lobo ha adoptado ser el sumiso de la relación pero yo demasiado posesivo con Tyler, eso lo pudiste notar en el entrenamiento, yo así le haré como cortejo además de que le cocinaré y le daré algunos regalos, será algo mutuo   - De acuerdo, demasiada cultura licántropa, es hora de trabajar - le dijo Jordan   Las horas pasaban y todo estaba calmado una que otra llamada de una señora mayor paranoica pero todo lo normal estuvo tranquilo aunque el papeleo que les daba Linden los dejaba agotados. Cerca de las cuatro de la tarde Tyler entró caminando directo a Dylan, con una bolsa con comida.   - Hola Dyl - le saludo Tyler dejando un beso en la frente del otro alfa - hola Jordan   - Hola Tyler, bueno yo iré al estacionamiento, tu padre está ahí - dijo Jordan saliendo rápido   - Te traje comida - le dijo dejando la bolsa en el escritorio mientras él se sentaba frente al escritorio   - ¡Eres un santo! Muero de hambre, estos papeles me van a consumir, lo bueno es que mañana comenzaré a patrullar y no estaré sentado en esta horrible silla, or cierto ¿tomo esto como el inició de l cortejo? - preguntó dándole una mordida a su hamburguesa   - Mi cortejo ha empezado además me gusta ver lo mucho que disfrutas de  la comida - dijo Tyler divertido limpiando un poco de salsa que tenía el castaño en la comisura del labio   - Pues tu cortejo ha sido aceptado, pensaba ir a hacerles la cena a ti y tus cachorros para después ir a casa - dijo Dylan disfrutando de su comida   - Sería perfecto, por cierto ¿cómo Jordan está tomando esto del cortejo?   - Se traumo un poco con el venado en su puerta trasera - rió divertido - pero ya le explique acerca del cortejo y parece más tranquilo. Deberías enseñarles a tus betas acerca de todo esto, las tradiciones, nuestras costumbres aunque no sean lobos tienen que saber lo más que puedan, la información es básica en este mundo   - Lo sé, tal vez tú podrías convencerlos por más que se los ordeno no lo hacen, es demasiado frustrante   - Son adolescente, me pasa lo mismo con Carver y Max…bueno ello casi siempre acatan mis órdenes pero es diferente a tus cachorros, los míos me tienen demasiado cariño y no digo que los tuyos no pero creo que creen que no pasa nada, que el mundo está bien y no me gustaría que vieran lo que de verdad ocurre fuera de este pueblo, el mundo es peligroso pero dejando eso de lado trataré de ayudarte - le dijo Dylan esbozando una gran sonrisa   Tyler asintió, su compañero tenía los ojos de alguien mucho mayor y sabio, podía notar que había pasado por más de lo que puede imaginar.        
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