prólogo
— Corre, mamá..., corre.
—Ten cuidado, cariño, o te caerás —dijo Teresa.
Ver a su hija Alba disfrazada de monito tras salir del colegio corriendo hacia el portal de su casa la hizo sonreír.
En cuanto llegaron, la niña se paró al ver un gran camión del que sacaban unos colchones y una amplia mesa. Una vez los metieron en el portal, la cría miró a su madre y preguntó:
—¿Por qué hacen eso, mamá?
Teresa observó el vehículo y, con una triste sonrisa por lo que intuyó que aquello significaba, murmuró: —Algún vecino trae muebles a su casa.
Alba miró de nuevo es una hermosa historia de amistad y superación que nos enseña que el amor puede aparecer en el peor momento de nuestra vida.
Alba y Nacho son dos buenos amigos desde la infancia. Por circunstancias de la vida, ambos se distancian en la edad adulta. Nacho se va a Londres, donde vive con su pareja y Alba se queda en su ciudad natal y allí contrae matrimonio. Este hecho hace que, durante un tiempo, los amigos vivan sin tener contacto.
Cuando Alba decide divorciarse, la muchacha acude a su amigo Nacho con el que, a pesar de los años, parece que su amistad está intacta. Todo se tuerce en el momento en que Alba descubre que Nacho está enfermo y que no se va a curar. En medio del desastre, Víctor aparece en la vida de la protagonista con el que surgirá un amor incondicional. es una hermosa historia de amistad y superación que nos enseña que el amor puede aparecer en el peor momento de nuestra vida.