LA MIRADA PESA… POV. ANA LUCÍA GAITAN Tres días completos habían pasado desde que salí de la casa Real, después que el odioso pero buenísimo príncipe exigiera que le entregara un informe por escrito y a todas prisas de mis hallazgos acerca de su desfalco financiero. La verdad es que lo ayudaría pues no me gustaría estar en sus finos zapatos. Estaba cada vez más nerviosa imaginando que él aparecería en cualquier instante encabezando una comitiva real en busca de su Pen Driver. Mi padre sin dudas se quedaría tieso cuando viera aparecer a semejando hombre buscándome…eso o algo peor. También podía pasar que sacara del baúl su escopeta para echar al mismísimo futuro Rey a los tiros. «Era una verdadera suerte que no tuviéramos perros, porque sin dudas también papá los usaría contra Eduard».