—¿No se supone que, mmh, iríamos a dar un p-paseo? —preguntó el menor intentado reprimir su voz y no gemir fuerte. Ese día la sirvienta tenía el día libre así que podían hacer muchas cosas en cualquier lugar de la casa sin temor a que les vieran, era una oportunidad que solo pasaba una vez a la semana así que MingZhao decidió aprovecharla tanto como pueda. (Aunque claro está que, aunque haya sirvienta o no, hacer ruido era irrelevante sin embargo, el que vieran a LaiSang así ya es otro nivel) —Cuando terminemos podemos irnos ¿Amenos que no quieres hacerlo? —preguntó antes de apretar uno de los pezones del menor sobre la tela de su camisa. —Ah, no es eso... S-Solo sigue. MingZhao quitó su camisa y su falda dejándolo solo en bragas y medias blancas, su boca mordía y succionaba uno de los