ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ 13. AEGAN HARRINGTON. Había arribado nuevamente a la ciudad, estuve fuera un par de semanas, evitando los chismes y los paparazis, Bloom no había querido darme la cara luego de sus declaraciones a ese canal. No la entendía, habíamos dejado todo claro y ella solo salió a decir mentiras. ¿Qué buscaba? ¿Fama? No la culpaba tampoco, era impredecible y eso en algún momento me llamó la atención, su particular forma de ser. Bajé del jet, me recibió uno de mis hombres de confianza y guardaespaldas, me abrió la puerta del auto y al subir vi a Mandy, mi sobrina. — ¡Tío! —saluda dándome un abrazo. —, ¿Qué tal tu viaje? —Aburrid