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Viernes 8 de Diciembre. Debería ser un día feliz, pero me siento triste. No pude dormir bien en toda la noche pensando en estos 9 días sin Max. - Hoy sería mi boda. - Digo a mi amiga. - Lo sé cariño. - ¿Por eso dormiste en mi cama? - Por supuesto. Se que será un día difícil para ti. Y quiero darte todo mi apoyo. Ven acá. Se apoyó en el respaldo de la cama, para así poder abrazarme. - Gracias. - Hoy podemos estar todo el día acostadas y llenarnos de comida chatarra que obviamente nos traerá mi amorcito. - ¿Ya le dices amorcito? - Si. ¿A caso tu no le decías a...?. ¡Perdón, perdón!. Siempre meto la pata. - Tranquila no te preocupes. - Comencé a llorar de nuevo. - Soy una debilucha. - No eres débil. Has soportado mucho a tus 24 años y aún no veo que te derrumbas. Así que no vue