Patito Feo

La fiesta

Narrador

El día de la fiesta había llegado, Nati estaba ansiosa porque llegara la noche, ella ya quería poner su venganza en práctica.

Mientras Ale estaba muy ilusionada porque al fin su vida estaba cambiando, ya no la habían molestado desde que es amiga de Nati todo iba muy bien, en realidad era demasiado bueno para ser realidad.

Pasaron las horas....

Nati ya tenía todo listo, ya estaba arreglada para la ocasión, eligió una camisa blanca y unos jeans rasgados de las rodillas color n***o y sus tenis Nike.

Y Ale estaba muy linda con su vestido en forma de princesa, pero no muy acampanado y unos tacones bajos y su cabello con ondas que le daban el toque final.

Pov Natalia

Ya todo está listo, los invitados empezaron a llegar solo faltaba mi invitada especial, estaba bailando un poco la canción de cuando yo te vi de piso 21, me encanta, después escuché que tocaron la puerta.

—Hola, Nati, perdón por llegar tarde es qué había tráfico —dijo Ale.

—No te preocupes Alesita, estaba ansiosa porque llegaras, pasa.

—¡¡Gracias Nati!! ¡¡Wuauu!! Que buena fiesta.

—¿Te gusta?

—Sí, claro que sí.

—Bueno, disfrútala entonces.

—Claro, eso haré.

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Narrador

La fiesta transcurrió, todos se estaban divirtiendo hasta que llegó la hora, exacto, la hora en la que la venganza de Nati se realizaría y la hora en donde la vida de Ale iba a cambiar por completo.

—¡¡¡A ver todos!!! —gritó Nati—. ¡¡¡Su atención, por favor!!! Tengo algo muy importante que decirles. ¡¡Ale!! Amiga mía, ven ponte acá para que todos puedan verte.

—Nati, no, ¡yo no!

—Sí, ven amiga, esto es muy importante para mí.

—Está bien.

—Muy bien, Ale tengo que decirlo, perdón.

Ale me miró con cara de confusión, pero esto no iba a parar, tenía que consumir mi venganza.

—¿Ustedes saben porque Ale se cambió de colegio?

—¡No! —dijeron todos.

—Pues bien, ¿aquí a la patito la despreciaron como siempre y fue el amor de su vida y saben por qué? Por Gorda, por fea, ¡¡por asquerosa, por ser la patito feo nunca la han podido aceptar por su físico, pues mírenla!! Cuando Dios la hizo se le olvidó ponerle belleza. —Ale estaba con los ojos a punto de llorar—. ¡¡Y pues Ale adivina qué, NO soy tu amiga y nunca lo seré porque solo mírate, eres patética y pues bienvenida a mi venganza, todo esto lo planee, el ser tu amiga, todo!!

Todos se empezaron a reír de Ale.

—¡¡¡Patito feooo!!! ¡¡¡Patito feooo!!

—Nati. ¿cómo pudiste, cómo? —Y empezó a llorar demasiado.

Pov Alejandra

No lo podía creer lo que había escuchado, siento que mi corazón se rompió en mil pedazos, siento que me falta el aire, ¡¡pero no era solo tristeza lo que sentía, no, sentía una profunda rabia!! Esta fue la gota que derramó el vaso. Como pude me recuperé y le dije a Nati:

—¿Sabes qué, Nati?

—¿Qué? —me dijo ella.

—Esto no se va a quedar así, hasta aquí llegó la patito feo, ¡¡quisiste vengarte de mí pues bravo!! Lo lograste, me hiciste pedazos. Pero sabes que desde hoy la patito feo está muerta, no sabes lo que acabas de hacer. ¡Permiso, que disfrutes tu fiesta!

Vi que Nati no pudo emitir ninguna palabra, espero que la conciencia nunca la deje tranquila.

Me fui corriendo, pero al correr dejé un zapato tirado.

—¡¡Estúpido zapato!! —dije muy molesta

Vi que Adri venía detrás de mí, pero no me detuve.

—¡¡Ale!! Amiga no te vayas así, espérame —escuché que decía Adri.

—Lo siento, Adri, prometo comunicarme contigo.

Llamé a Julio mi chófer para que me fuera a recoger, el cual llegó muy rápido.

—Niña Ale, ¿qué le pasa?

—No, Julio, no preguntes, solo ve a casa rápido por favor.

—Está bien, mi niña.

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Después de llegar a mi casa hablé con mi papá de lo que había pasado, él se dedicó abrazarme y a decirme que ignore a esa gente, que ellos tenían caca en la cabeza y que por eso no podían pensar, después de hablar con papá subí a mi habitación y llamé a mi mamá.

Llamada

¡¡Alo, mami!!

¿Hija cómo estás?

Mal, mami, pero quiero irme a vivir contigo por un tiempo, mañana mismo tomo un vuelo y salgo para allá.

Está bien, hija, creo que tenemos mucho por hablar así que te espero aquí, mi bebé.

Fin de la llamada

¡¡Hasta hoy fui la patito feo!!

Voy a irme, pero volveré lo juro, ¡juro que ya no volverán a pisotearme jamás, Natalia Olivares nos volveremos a encontrar, lo prometo!