Bien, llego la hora... no tengas miedo puedes enfrentarte a él.
Hora del show.
- ¿Quién eres tu?
Sonrie despues de escucharme.
- Ahora no me importa si me conoces o no.
Lo miro confundida.
- ¿Que estas tratando de decir?
Ni siquiera me di cuenta cuando el director salió de la oficina.
Su sonrisa creció aun más.
- Estoy seguro de que recuerdas perfectamente que me dejaste por otro chico.
- No recuerdo eso.
Si... no debí haber venido hoy... estúpida responsabilidad.
- ¿De verdad?
Asenti nerviosamente.
Caminó hacia mi e inconscientemente di un paso atrás quedando atrapada entre él y la pared.
- Ahora... ¿A donde irás Rosa?
- No me llames así o...
- ¿O si no que? ¿Que vas a hacer?
- ¿Que quieres Jonah? Estás perdiendo mi tiempo.
- Vayamos directamente al grano Rosa
- ¿Qué estas tratando de decir?
- Parece que estas ansiosa- sonríe y yo me sonrojo.
- No estoy ansiosa, solo quiero saber de que rayos estas hablando.
- Vamos a tener una cita.
Por el tono de su voz supe que me lo ordenó.
- ¿Que?
- Me escuchaste.
- Claro que lo hice, pero ¿Por que vamos?
Su rostro enmarco una gran sonrisa.
- Me dejaste plantado, así que planeé nuestra cita para hoy
Oh Dios... es un psicópata.
- No lo soy Rosa, estas en buenas manos.
Me tapé la boca con la palma de mi mano y cerré los ojos, vaya manera de avergonzarme a mí misma, ¿Por qué tengo que pensar en voz alta?
- Vamos o llegaremos tarde
- ¿Quien dijo que iré a una cita contigo?- crucé los brazos contra mi pecho.
- No es una opción.
- Claro que lo es, no iré contigo.
- Ven o te arrastro conmigo, eso no será ningún problema.
- Ni siquiera me lo preguntaste correctamente- apenas lo susurré pero él me escucho y se rió entre dientes.
Se puso de rodillas y sostuvo mi mano derecha en la suya mientras me miraba a los ojos.
- Clara Kennedy ¿Irás a una cita conmigo por favor?
Me sonrojé por su gesto, nadie nunca me ha preguntado eso de esta forma.
- Con una condición.
- Cualquier cosa por ti- dijo con esperanza en sus ojos.
- Prométeme que no volverás a ser un mandón conmigo.
- Te lo prometo, ¿Ahora irás a una cita conmigo?- sonríe.
- Sí, pero que no sea muy lejos de aquí.
- Perfecto
Si papá sabe que voy a tener una cita con el hijo de su principal enemigo, entonces estaré en un gran problema.
- ¿Que hay de mis clases?
- Te las daré después y no tendrás problemas con eso.
No me sorprende para nada, él es empresario y yo estoy estudiando administración de empresas pero... ¿que pasa con mi otro curso de diseño?
Una vez reaccioné me di cuenta que no vamos a salir de la universidad sino que nos dirigíamos a la terraza.
- ¿Por que vamos a la terraza?
- Haces muchas preguntas Rosa.
Me quede boquiabierta cuando llegamos a la terraza.
- ¿Por que hay un helicóptero en las instalaciones de la universidad?
- Obviamente para llevarnos a nuestro destino
Le dije que tuviéramos nuestra cita cerca de la universidad, entonces ¿Por que necesitaríamos un helicóptero?
- Jonah...
- Se lo que preguntarás, así que te sugiero que tengas paciencia, cuando lleguemos allí lo sabrás porque no pienso decirte hacia donde vamos.
- Otra vez estas siendo un mandón- susurré.
- ¿Que dijiste?
- Nada- me encogí de hombros y observe fuera de la ventana.
No voy a mentir, pero estoy muy emocionada por nuestra cita.
XXX
- ¿Que diablos?- casi grite cuando vi donde estabamos.
- Calmate Rosa
Trató de consolarme pero le di una mirada asesina, le dije claramente que me llevara cerca de la universidad, pero ignoro mis palabras y me llevo fuera de la ciudad a su lugar privado.
- Por favor Clara, calmate. Lamento traerte tan lejos pero ya lo tenia planeado y te prometo que te llevare a tu casa en el momento adecuado.
- Entonces estabas lo suficientemente seguro de que iría contigo- le dije de forma sarcástica.
- Perdoname Rosa, prometo cambiar mi lado mandón por ti.
Tan solo pude suspirar pues no podia hacer mas nada, sostuvo mi mano y me hizo seguirlo por un rato hasta que llegamos a un pequeño estanque rodeado por un bosque. Había una manta en el suelo con una canasta de picnic.
- Se que no es mucho porque nunca he tenido una cita y...
- Jonah, es perfecto- lo interrumpí con una sonrisa la cual el me devolvió dulcemente.
Tengo que admitir que me gusta mas esta sonrisa dulce y verdadera que esa que tiene por mueca, se ve mas guapo de esta forma.
- Deberías sonreír más a menudo.
- ¿Por qué?
- Porque me gusta cuando lo haces.
- Mi hermosa Rosa, ¿te estas enamorando de mi?
Y volvió a ese intento de sonrisa, toda altiva y arrogante. Juro que lo voy a matar a él e incluso a mi misma por provocarle esa arrogancia descarada. Decidí no comentar nada al respecto y nos sentamos en la manta mirando hacia el estanque.
Este lugar es más hermoso que la isla de papá. Todos los años íbamos allí como parte de nuestras vacaciones familiares, pero todo se detuvo hace dos años. Extraño esa época en la que solíamos disfrutar juntos sin ningún estrés.
- ¿Que estas pensando?
- Nada
- No parece nada
- Mi papá tiene una isla a la que solíamos ir todos los años en nuestras vacaciones familiares, pero dejamos de hacerlo dos años atrás.
- ¿Por que?
- Mi padre expandió sus negocios y al parecer los quiere mas que a su propia familia.
Se que sueno dolida, pero es que extraño mucho a mi papá, durante los dos últimos años no pasamos mucho tiempo juntos, ahora su negocio es más importante que su propia hija. A veces me pongo celosa de su amor y pasión por su trabajo.
- No te preocupes, podemos venir aquí cuando quieras.
- ¿Planeas quedarte conmigo por mucho tiempo?
- No por mucho Rosa, pero siempre estaremos ligados el uno con el otro.
¿Que quiere decir con esto? prefiero no preguntarle para no arruinar este momento tan bonito y mágico con mis dudas.
Después comimos y hablamos sobre nuestras cosas favoritas y lo que nos gusta hacer, también compartimos anecdotas de nuestros días en la preparatoria.
- ¿En serio eras un nerd?
- ¿Por que estas en shock?
- Porque pareces más al chico malo que al nerd.
- Oye, yo no era de esa clase de chicos.
- Si claro que lo eras- le dije de forma cantarina y bromeando.
- Te vas a arrepentir de esto- dijo con una sonrisa malvada en su rostro.
- ¿Que vas hacer?
Y sin pensarlo mucho comencé a correr mientras reía, el corrió detrás de mi y como no pude ir más rápido me atrapó envolviendo su brazo por detrás.
- ¿Ahora donde vas a huir?
- Déjame.
- No
Y empezó a hacerme cosquillas, por mi torpeza me caí al suelo con él encima, pero esto no lo detuvo.
- Basta- dije entre risas
- No
Después de unos cinco minutos se detuvo y me miró a los ojos, fue cuando note en la posición que estábamos. Esto era incomodo y cuando quise mencionar algo, sentí una gota de agua en mi cuerpo y dió inicio a una lluvia muy fuerte. Jonah se aclaró la garganta, se bajo de mí y me ayudo a levantarme.
- Vamos dentro- susurro y tomó mi mano entre las suyas.
Al parecer le gusta mucho tomar mi mano, pero no se siente mal... es diferente y cálido.
- ¿A donde?
- Dentro de la casa, dah.
Pero yo nunca vi una casa en nuestro camino a este lugar. Después de una caminata algo larga llegamos a una hermosa casa rodeada por el bosque.
- ¿Te gusta?
- Me encanta.
Miro la hora, 5:00 pm. Es tiempo de irme a casa antes de que mi padre descubra donde estoy.
- Jonah
- ¿Mmm?
- ¿Cuando nos vamos?
- Si quieres podemos irnos ya, solo dejame llamar al piloto y luego nos podremos ir.
Mientras que el tomaba su celular y hablaba con el piloto, yo me dedicaba a apreciar la belleza de la casa, hasta que su voz me trajo de nuevo al presente.
- Rosa...
- ¿Si?
- Se avecina una gran tormenta, así que estaremos atrapados aquí hasta mañana por la mañana.
Oh Dios mio... estoy muerta.