Holland cierra los ojos y se observa al espejo suspirando y bajando sus hombros a modo de defensa. Su reflejo le demostraba nada más y nada menos que el asombroso terror que tenía en estos momentos tanto por su cuerpo como así también por su interior, sintiéndose un ser absolutamente vulnerable y por sobre todas las cosas una adolescente quisquillosa que no tenía ni la menor idea de lo que hacer antes su primera cita. Y no es que justamente esta cena que iban a tener con el castaño fuera una cita para ella, pero debido a su temperamento su forma de ser y cómo se manejaba en el mundo tanto humano como sobrenatural no solía tener ningún tipo de cita ni con manos ni con otro tipo de seres, Y eso se basaba pura y exclusivamente en el simple hecho de que no necesitaba involucrarse de esa man