Beth:
En la mañana previa a la nochebuena mi madre y yo nos la pasamos prácticamente todo el día en la cocina, yo le ayudaba como de costumbre, y ella estaba poniéndole especial cariño a la cena navideña, ya que lógicamente hoy tendríamos invitados.
A mamá le hacía demasiada ilusión recibir a Yacob, por alguna razón en particular él le causaba una buena impresión, mi padre por otro lado era más receloso, claro, él no lo conocía, ni a todos sus problemas, pero eso tampoco mi madre lo sabía, eso solo lo sabía yo, ya que él me los había confiado a mí y yo había prometido no decírselos a nadie.
Llegada la noche, mi madre puso especial ahínco en que usara un vestido verde que me hacía lucir tan pálida como a la nieve, no me encantaba, daba miedo, y no podía ponerme pintura como ella para
