—-Con los Noir—— La mañana siguiente al intento de asesinato del Príncipe Frederick todos los nobles estaban alterados, y no dejaban de atosigar a la agobiada prometida del joven Príncipe. Esta por su parte se encontraba feliz. -Lo hiciste muy bien Azael-. -Gracias por tus palabras, Padre- -¿Cómo lograste darle el veneno sin que nadie lo notara?- Azael soltó una leve risilla y con una gran sonrisa respondió. -Lo puse sobre el dorso de mi mano, cuando la beso, pues…- -¡Azael! Eso fue muy peligroso pudiste haber muerto-. -No te preocupes padre, el veneno del escorpión rojo solo es tóxico si lo ingieres y por precaución había tomado el antídoto-. -Si tú tomaste el antídoto ¿Como se salvó el Príncipe?-. -Eso fue muy fácil Padre, sabías que el Efrain el aprendiz del médico real es herm