Violeta Las ganas que tenía de besarlo, al verlo está tarde, me volvió loca, pero me contuve, el tenia que aprender a no tratarme como una mas. En el pasado, salí muy lastimada, por personas que pensé, jamás me harían daño y no fue así, no iba a pasar otra vez por lo mismo. Falta media hora, para que Ignacio pase por mi, fui a mi habitación y me bañe, Talía esperaba que le contará lo que había sucedido con Alexander. —Según el, tuvo una urgencia —Voy al closet, quiero algo bonito—. No le creo nada, Alexander es un mujeriego, Talía, por eso no quiero entregar todo de mi a una persona, que terminara dañando mi corazón y dejándolo en mil pedazos. —Así es, por eso a partir de hoy, soy Team Ignacio —Me río—. Pero como amiga, te aconsejo que te alejes, no me gusta como te trata, no te mere