Suspiro algo alegre por poder salir de esa habitación, o casa en general. Se siente bien salir del cautiverio. - ¿No tendrás problemas por el trabajo por haber faltado hoy también? – le pregunto al hombre a mi lado después de darme por satisfecha del silencio. - Te seré completamente sincero – volteo a verlo esperando porque acabé con su momento de suspenso – Renuncié ayer, ya no soporto a esa gente, ya veré como me resuelvo – abro la boca sorprendida porque me esperaba cualquier cosa menos eso. - Francisco ¿qué quieres decir con que renunciaste? – pregunto algo molesta por eso. Fran es mucho más responsable que eso, por lo que no entiendo a qué se refiere con que “ya no los soportaba” - Eso quiero decir, nunca había conocido una mujer como Elena, que ser tan lleno de odio y malas inte