Ya estaba harta de escuchar a Sabrina la jefa de mercadeo que fastidio, pero el deber es deber, no sabía ya a que hora largarme, mientras mi papa estaba en sus sesiones sexuales con esa Sor Purísima Al terminar ya era hora de almorzar, me dirigí a la oficina de mi papá toque la puerta y no me contesto nadie, la asistente me comunico que mi papá dejo un recado que lo alcance en el restaurant italiano donde íbamos siempre pues su comida es exquisita, me imaginé que estaba con la susodicha Zorra purísima Baje y subi a mi dragón de acero lo hice rugir y fui al restaurant al llegar note que estaba su moto, eso me extraño usualmente cuando tiene compañía usa el auto, pero que más da entre y lo vi solo sentado llegue y salude —Papá ¿estas solo? ¿Cómo es posible? Te quedaste con esa mujer, creí