Cristian ignoró por completo aquella figura que tenía enfrente, tomó de la cintura a Salomé para poder continuar con sus pasos y siguió sin la necesidad de responder.
Salomé estaba algo inquieta y sorprendida por aquellas palabras escuchadas. Miró hacia atrás y visualizó una mirada concentrada en ellos y en cada paso que daban. Una mujer sostenía su mano, parecía ser su acompañante. Tenía la mirada obediente al igual que la postura. Sintió un pequeño pellizco en la cintura, alertaba que no mirara hacia tras y se concentrara en el. Eso lo supo cuando miró a Cristian. Su rostro denotaba seriedad y hasta algo de disgusto. Sólo pudo asentir y continuar junto a él.
Al llegar a un gran salón sus ojos se posaron en la pareja que bajaba las escaleras. Eran los señores Roberts tomados de las man
