Todo a su alrededor había desaparecido, sólo existían ellos dos, cuando ambos necesitaron respirar se separaron. —Eso fue — Lía no pudo terminar de hablar porque Gael volvió a besarla. —Increíble, mágico, sorprendente -— dijo Gael cuando terminó de besarla, ella solo asintió. Gael estaba eufórico, nunca había sentido algo tan maravilloso, estar realmente con la persona que quieres era una sensación maravillosa, ¿Cómo pudo desperdiciar dos años con Lina? Había topado con mucha suerte que Lía quisiera darle una oportunidad a él, pero él quería más, no quería sólo una cita, la quería para él, para siempre. —Salgamos de aquí — agarró su mano y fueron por sus cosas a la mesa, Gael pagó las bebidas y dejó una gran propina. —¿A dónde vamos? — preguntó Lía cuando estuvieron fuera. —Ya verás