El mismo día Miami Teresa Me he quitado un peso de encima al confesarle a Alejandro parte de mi pasado, sé que todavía falta mucho para sincerarme con él, pero necesito dar un paso a la vez, porque me costó hablar de mi hija, fue volver a revivir una parte dolorosa de mi pasado con la que todavía estoy luchando, incluso está el temor que este hijo tenga los mismos antecedentes, aunque ahora necesito refugiarme en los brazos de mi novio para sentir que puedo enfrentar todo lo que me espera. En fin, mi cabeza es un mar de preocupaciones pensando en mi divorcio, en este hijo, hasta que soy arrancada de mis pensamientos por la voz de Alejandro. –¡Mi cenicienta! Te siento un poco ausente, si quieres decirme que me vaya, lo entenderé, sé que necesitas descansar y yo te lo hago imposible. –