Narra Esmeralda. Disfrutamos la noche como si el mañana no existiera. Estaba muy emocionada con mi nueva vida. Mientras Jack dormía, pasaba mi mano por su suave mejilla, había desperdiciado tanto tiempo en querer pretender amar a alguien que no valía la pena y me perdí en los brazos equivocado. Pero ahora todo sería distinto, tenía puestas mis esperanzas en el amor verdadero de Jack. Al fin puedo decir que seré completamente feliz. Al rededor de las 5:00am, tomamos el camino de vuelta a la ciudad. Jack me dejó en mi departamento, mientras que él fue a su mansión para cambiarse de ropa. No pude evitar tirarme en la cama, sonreír como una adolescente enamorada, realmente había tenido la mejor noche de mi vida. Jack y yo seremos felices aunque no nos casemos, no hay que firmar un pape