El Arte de Amar ©

Capitulo 80

—¿Qué? No, no amor, no me digas eso, por favor—el ojiverde la mira con sus ojos ya húmedos

—Sería lo mejor Bill—ella bajo la mirada

—¿Lo mejor para quien Dania?, ¿Para ti? Porque en sí no estás tomando en cuenta mi opinión—dijo ahora con seriedad el ojiverde y con sus lágrimas saliendo

—Claro que importa, pero es que....—su llanto se hacía presente

—No llores amor, no hagas eso—este limpiaba sus lágrimas—Eres lo que más amo en este mundo y no voy a permitir tal cosa, ¿si? Buscaremos soluciones, no pienso perder a mis dos amores—Bill la mira a los ojos y baja una de sus manos al vientre de esta

—Está bien Bill—ella se tranquilizaba

—Hemos pasado por muchas cosas amor, pero esto hace que nuestra relación se fortalezca, ni nada ni nadie nos va a separar, ¿entendido?—ella asiente y se besan en los labios

Se quedaron dormidos profundamente, solo se necesitaban el uno al otro para poder sentirse tranquilos y por lo menos olvidar ciertos acontecimientos graves. A la mañana siguiente, Bill despertó con pereza y dolor en sus ojos, posiblemente por haber llorado, miro por unos largos minutos a su esposa, tan tranquila, por un momento Bill pensó “¿Cómo es que alguien tan angelical le pasen estas cosas?”, se vistió y bajo a preparar el desayuno

—Siempre eres tan puntual para hacer el desayuno—dijo el ojiverde llegando a la cocina y mirando a su buen amigo Landon

—Estoy acostumbrado Bill—sonrió de lado—Y ella......¿ella cómo está?—pregunta el castaño un tanto dudoso

—Está bien, creo que lo está tomando bien, aunque anoche me dijo que decidiera por el bebé en caso de que..... bueno tú sabes—sus miradas expresaban mucha tristeza

—Me imagino, pero habrá soluciones amigo, ya lo verás, ¿ya le avisaste a su padre?—dijo el castaño mientras servía el desayuno para Dania y ellos

—Aún no, tengo temor en decirles—pasó sus manos en el rostro soltando un suspiro

—Bueno, si gustas yo podría decirles—dijo de lo mas tranquilo Landon

—Eso sería grandioso amigo, pero como su esposo es mi deber—se miraron por un instante

—Tienes razón, bueno, aquí tienes el desayuno para Dania, no creo que tenga ánimos para venir al comedor—le entrego una bandeja, en el cual el desayuno se veía antojable

—Gracias, amigo, de verdad no sé que haría sin ti—el ojiverde le sonrió al castaño

Bill subió a su habitación, miro a su esposa aun dormida, este se acercó a pasos lentos hasta a ella para hacerla despertar, le mostró el desayuno y hasta eso Dania tenía apetito, eso le dio gusto al ojiverde. Después de haber desayunado, se fue al set a las grabaciones, condujo con tranquilidad, aunque aún no sacaba de su cabeza lo que el doctor le había dicho de ella y lo que ella pedía. Llego al set, se quedó en el auto y le marcó al padre de Dania, el señor se oía bastante triste y le dijo que estaría en NY en la noche

Landon estaba en casa con Dania animándola a ver películas o series, incluso se pusieron a jugar videojuegos y otras cosas más, esta mostraba una gran sonrisa, Avan dijo que iría de visita, este aún no sabía sobre lo que tenía Dania, Landon no lo había considerado prudente decirlo, a él no le correspondía decir. Después los tres se encontraban jugando, pero pararon, ya que Dania no se sentía bien, estaba agotada, pero sonriente, ella se acostó y su lado ambos chicos la miraban

—¿Estás bien linda?—pregunta el castaño tomando de su mano

—Sí, estoy bien solo..... solo me canse—sonrió poco—¿Supongo que ya saben lo que tengo no?—esta los miro a ambos chicos, Landon bajo la mirada, Avan la miraba sin siquiera saber de qué hablaba—Tengo cáncer y estoy embarazada, vaya sorpresas ¿no?—dijo con un tanto de ironía

—¿Que cosa? Pero como es que.... bueno no creí que tú.....—decía con titubeos Avan, Landon palmeo su espalda calmándolo

—No....no hablemos de esto linda, sé que es una situación muy.....—la chica lo interrumpió

—Descuida, quiero hablarlo, sé que es difícil y necesito pedirles un favor—ambos la miran con mucha atención—No dejen a Bill solo, él los necesita, sé que sufre por esto y no querrá desahogarse frente a mi así que, denle su apoyo ¿si?—sus ojos se humedecen—Y si algo llega a pasarme, no dejen morir a mi bebé—unas lágrimas salían y las limpiaba de inmediato—¿Landon?—preguntaba la chica, ya que miro que el castaño no respondía y bajaba su mirada

—No Dania, no haremos tal cosa, a ambos los salvaremos ¿si?—él levanto su mirada y lloraba, a lo igual que Avan

—Los quiero mucho chicos, gracias por estar aquí—estiro sus manos y estos la tomaron

Después de aquella charla conmovedora, Landon evitaba que Dania sacara ese tema, ahora entendía lo difícil que era para Bill en tomar decisiones así. Bill llegó a casa acompañado de su suegro y el buen amigo Owen, miro que en la sala se encontraba su esposa junto a los chicos, el señor Speitzer corrió de inmediato a ver a su pequeña hija, se unieron en un abrazo conmovedor y lleno de amor, hubo lágrimas por parte de los dos

—Mi pequeña niña, mi bella niña, te amo tanto hija—el señor le susurraba al oído

—Yo también papi, te amo—ella limpiaba sus lágrimas—Gracias por traerlos mi amor—dijo gustosa la chica mirando a su esposo

—Sabía que te pondría mejor—dijo Bill sonriendo de lado

—Yo haré de cenar para todos—dijo Landon dejando a los recién llegados con Dania cuando tocaron la puerta y Bill fue a abrir

—¿Con el señor Brunner y Fisher?—el castaño se paró junto a su amigo

—Somos nosotros, ¿qué pasa?—preguntó el ojiverde

—Somos de la policía y venimos a hacerle unas preguntas por la desaparición de Kate Young—los chicos se miraron con nervios