Boris llevaba largo rato pensando en la situación en la que se encontraba, no cabía duda de que en realidad él no deseaba estar en la posición en la que se hallaba. No le agradaba el hecho de depender de aquellas personas que acababa de conocer, y es que no le daban buena espina después de todo, se sentía vulnerable y presionado por quedar bien con ellos, sin embargo no le agradaban mucho. - ¿Y ustedes que creen?… Les preguntó. - Yo creo que si vamos a hacer las cosas se tienen que hacer ya… aquí hay muchas personas. Señaló Herros. - El problema no son esas personas, el verdadero problema es ese endemoniado ser con problemas de personalidad… ¿Como matamos a Calisto?. Se preguntó Cunlen. Boris hizo una mueca. - ¿Que te sucede Boris? ¿Ya te dio miedo?. Le preguntó Herros en ton de