Frustrado, sin saber qué hacer o a qué lugar ir para encontrarla, me senté en el borde de la jardinera que está en la entrada del Resort. —Hermano —Gelys llamó mi atención. Hace apenas unos pocos minutos que bajó de su habitación. Levanté la cabeza para mirarlo. —Dime —Le pedí sintiéndome totalmente aturdido. —¿Ya intentó rastrear la señal de su móvil? —Me preguntó en un tono de voz pausado. —No —Acepté cerrando los ojos, sacudí levemente la cabeza por lo aturdido que me siento y me puse de pie. Definitivamente que cuando el terreno de uno es el que es invadido es más difícil mirar alrededor y considerar por cuál lado saltaron la talanquera para llevarse el ganado, se ve de manera diferente la situación; bueno, de hecho no se ve, la sorpresa de darte cuenta que no eres inmune a ata
Download by scanning the QR code to get countless free stories and daily updated books