Mitch sonrió en cuanto Scott se fue con los gemelos pero vio una ligera preocupación en el rostro del príncipe. - Tranquilo, ellos no estarán en ningún peligro, nadie en el palacio le hace daño a los otros además de que Scott está con ellos - Me siento más tranquilo sabiendo eso aunque no me gusta que esa mujer ronde por los pasillos de su palacio - Recuerda hablarme sin formalidades y no puedo hacer nada con la amante del emperador pero tampoco tienen tantas libertades, no tiene ninguna dama de compañía y lo guardias no sirven a ella además de que si quiere comer tienen que preparase las cosas ella misma. Todos en el palacio tienen esas órdenes e incluso si no las tuvieran ellos mismo me dijeron que no la atenderían en nada – le dijo Mitch con una sonrisa algo malévola - Deben de