Stiles abrió los ojos encontrándose con la imagen que más amaba ver en sus mañanas: Derek estaba recostado a su lado con una ligera sonrisa adornando sus rostro, su respiración lenta y tranquila. Amaba verlo dormir, era como si nada le preocupara y le gustaba verlo de esa manera. - Buenos días – dijo Derek abriendo sus ojos, había despertado poco después que Stiles, él siempre estaba al pendiente de los latidos de su castaño sin importar que estuviera dormido. - Buenos días sourwolf – le saludó Stiles besando los labios de su amado lobo - Creo que me mudare de manera permanente aquí – dijo Derek levantándose y atrayendo al castaño entre sus brazos, ambos estaban desnudos y el lobo quería continuar lo de la noche anterior pero Stiles solo rio y se alejó a lo que Derek hizo un puchero.