When you visit our website, if you give your consent, we will use cookies to allow us to collect data for aggregated statistics to improve our service and remember your choice for future visits. Cookie Policy & Privacy Policy
Dear Reader, we use the permissions associated with cookies to keep our website running smoothly and to provide you with personalized content that better meets your needs and ensure the best reading experience. At any time, you can change your permissions for the cookie settings below.
If you would like to learn more about our Cookie, you can click on Privacy Policy.
(Enero 2, 2018, Jacksonville, Carolina del Norte) (Victoria Ángel Ivanna Jhons) Es martes y voy al complejo, al parecer en el mundo hubo una tregua pues pasamos tanto noche vieja como año nuevo muy tranquilos, lo que es un logro. Claro es mucho pedir que esta paz sea duradera, al menos para mí pues en casa con los católicos que son Pietro y María y como poco necesitan en la familia para hacer una fiesta, cielos si hasta parecemos mexicanos, haciendo fiesta hasta porque lloro el niño y no es que los critique ya que me gusta verlos reunidos y felices, pero diablos que somos muchos y entre cumpleaños, festejos oficiales y los eventos de caridad, tenemos más fiestas organizadas que un salón de fiestas de renta y yo que deseo un poco de paz para planear mi bo