Rápidamente lo llevaron al quirófano, pero había algo que no estaba bien en Kilian: — Su alma no está en su cuerpo —dijo el doctor bastante confundido. Se apartó de Kilian y no dejaba de repararlo— ¿qué crees que estás haciendo? Así era, el alma de Kilian estaba con Adele: — Me, me duele mi cuerpo —soltó Adele al sentir que alguien la abrazaba con fuerza. — No te preocupes, yo te voy a salvar, no dejaré que mueras ¿entiendes? —susurró Kilian al oído de Adele. — ¿Kilian? —preguntó. — Sí amor, estoy contigo, no te preocupes —Kilian soltó algunas lágrimas— prometí que te iba a proteger y eso haré, no dejaré que nada malo te suceda de ahora en adelante. Kilian observó que Adele traía poca ropa, eso lo confundía un poco: — ¿Dónde está tu ropa? —le preguntó. Adele tenía los o