— Entonces explícame, tú y Horacio fueron a la academia, pero en vez de querer ser polis hicieron el gamberro como anormales. — Asi es – sonrio Gustavo – Él y yo estuvimos viajando un tiempo, hasta que llegamos aquí, le jugué una mala broma donde llamamos a la policía, la ambulancia y fue donde conocí a Aide. — Crei que se conocieron de otra manera. — Nope, fui un idiota que vio muchas veces en un solo dia, terminamos en la cárcel – sonrio divertido – Fue un felchazo el nuestro. Cuando ella supo todo de mi, como tú ahora me dijo que entrara con ella a servir en la Guardia Civil, ella aun no era ni Sargento. — Horacio dijo que estuviste un tiempo en Los Santos. — Si, me fui y dijimos que llevaríamos una relacion a distancia lo cual no funciono – suspiro – Ese mismo año que nos conocim