Al terminar el turno espere a Sylvie afuera del servicio porque tenía que preguntarle cuando volvería a hacer la guardía, supongo que en el turno de Melissa, pero hoy cuando llegue la ví corrigiendo unas órdenes que según las compañeras había hecho mal y la doctora Sylvie estaba furiosa.
–Doctora Dupont –le hablé cuando la vi salir, ella se detuvo y me sonrió.
–¿Quieres salir otra vez?
–¡No!–exclamé –. Aún me duele la cabeza y no he comido nada.
–Con un poco de práctica vas a mejorar –contestó –. Tus amigos son bastante divertidos.
–No son… –me detuve –. Bueno, eh… es que casi no salimos así.
–Todos tenemos responsabilidades –mencionó mientras sacaba algo de su bolsa –. Esto es tuyo.
–¡Mi teléfono! ¡Gracias!
–Lo apagué porque estuvo sonando varias veces, fue un fastidio –bu
