MEGAN HOBBS
Los días siguientes me la paso con mi abuelo ayudándole con algunos asuntos legales de su rancho. Como todos los años le preparo su declaración de impuestos, lo cual siempre me ha llevado tiempo dado que él no es la persona más organizada.
No he visto a Max más que para cenar o desayunar puesto que ha estado viajando constantemente a unas reuniones fuera de Montana. Tampoco es como si tuviésemos mucho qué decirnos, pero no puedo evitar pensar que de hecho sí lo echo de menos.
El aire de Montana me da en el rostro, el verde del césped poco a poco se comienza a ver dado que estamos saliendo del bendito invierno que nos ha traído una enorme y gruesa capa de nieve. A pesar del clima, la tierra se alza mientras el vaquero mueve al caballo dentro del cerco intentando domarlo.
