Punto de vista de Eden Asher Donahue es un extraño enigma de hombre. Camina con fluidez como si estuviera bailando un vals en el aire, como si las normas sociales y físicas de este mundo no se atrevieran a tocarlo en absoluto. Eso, y es hermoso. Todo en él es hermoso, desde la estructura ósea de su rostro cuando presiona sus labios contra el borde de su taza de café, y la sonrisa torcida que parpadea cuando le doy la espalda, sólo para sorprenderlo mirándome la parte posterior de la cabeza como si se está imaginando cómo se ven mis ojos cuando estoy esperando en otras mesas. Ha visitado el restaurante todas las noches durante la última semana después de besarme en el estacionamiento. A veces lo llevo de regreso a casa, y a veces protesto y camino sola a casa, sólo para sentirlo acercán