Corazón de un hada

El reino del agua.

-¡¿Como puedes ser tan insolente, maldito principe?!

*Parece que esta vez si me pase un poco, pero no se me ocurría ninguna otra forma para hacer que ella despertara su poder...

-Vamos Aurora... Lanzame todo lo que tienes...

*Ella comenzó a lanzar bolas de fuego rosa a diestra y siniestra, estaba por completo fuera de control pero tome ventaja para volver a crear el escudo con mi espada y mis poderes, estos hacían que las bolas de fuego rebotaran y fueran a caer directo al barco.

-¡¿Como se atreven a atarcanos de esta forma niños tontos?!

*El lider tomó una de las flechas y la lanzó en dirección a Aurora...

-¡Noooo...!

*Trate de moverme rapido para bloquear la flecha pero en ese instante Aurora junto ambas manos para unir su energía, deshice el escudo en micro segundos, en su lugar lance rapidamente una bola de fuego azul para eliminar la flecha. Cuando ví nuevamente hacia Aurora, ella ya tenía una enorme bola de fuego rosa que iba dirigida directo hacía mí.

-¡Rayos!

*¡Debo tirarme al agua en el momento indicado...!

*Ella se apoyo directamente en uno de sus pies para lanzar esa bola de fuego a mi dirección...

-¡Ahora!

*Me lancé al agua para que la bola pasara de largo y fuera a dar al barco. Cuando choco la onda expansiva hiso que la balsa se alejara mucho del barco, el problema es que el mismo impacto y sin nadie guiandola hiso que la balsa se diera vuelta y Aurora cayera al agua de nuevo.

*La onda levanto grandes olas que me ayudaron a llegar mas rapido hacia ella, que por suerte esta vez si se había logrado agarra de la balsa.

-Fiuuu...

*En cuanto la ví aferrandose a la balsa suspiré de alivio, no se miraba lastimada de ninguna parte de su cuerpo pero caería dormida muy pronto asi que tuve que acercarme a ella lo mas rapido posible.

-¡¿Que pasó....?!

Estaba confundida, hasta hace pocos minutos estaba en la balsa con el principe y ahora estaba aferrada a esta cosa para no hundirme, lo peor del caso es que podía sentir como poco a poco mis energías se desvanecían...

-¡Prin... Principe...!

De pronto y justo antes de que la debilidad me hiciera soltarme de la balsa pude sentir que alguien salía del agua y me tomaba de la cintura.

-Aquí estoy.... No te preocupes, ya todo esta bien.

*Aunque decia eso aún debía darle vuelta a la balsa con ella encima.

-Haizzzz... Supongo que no queda de otra...

*Concentré mi magía de nuevo esta vez con una sola mano, luego creé una bola de agua grande, ahora la parte dificil...

*Use mi energía vital para que esa bola de agua entrada al oceano en dirección de Aurora, una vez la bola de agua estaba abajo de ella, transferí un poco de mi energía a modo que una capa de protección fina la recubriera, esa capa de protección no era tan poderosa como la de los piratas si sufriamos de un ataque a lo mucho evitaría que ella sangrara pero el dolor y el golpe definitivamente los sentiría. Una vez que logré cubrirla de esa fina capa de protección subí la bola de agua con la misma mano que estaba ocupando para sostenerla. La bola se levanto llevandose a su paso a Aurora con ella exitosamente.

-Muy bien, disfruta de tu cama de agua en lo que termino con esto.

*No era alguien del reino del agua por lo que el tiempo de esa bola era muy limitado, debía darle vuelta a la balsa y sostener nuevamente a Aurora antes de que se reventara.

-Ah... Ah... Ah... Ahora.... Ahora comprendo porque mi padre siempre decía que proteger a alguien era mil veces mas complicado y dificil que construir un castillo solo...

*Aurora ya estaba reposando nuevamente en la balsa ajena completamente a todo lo que estaba pasando a su alrededor.

-Creo que despues de toda esa energía que gastó no va a despertar en el resto del viaje, asi que supongo que al menos por ahora lograré llegar allá sin mayores problemas...

*Si un monstruo llegara a aparecer en este momento estaríamos acabados por completo. Mi poder es dominar el fuego, sin embargo en este viaje tuve que usar mucha de mi energía vital directa para poder salir ilesos lo cual hiso que mi cuerpo tambien se debilitara bastante.

-Vaya ironía... Jamas creí que la dominación de mi energía vital nos salvaría contra unos enemigos tan simples... ¡Esto es realmente humillante!

*Desde que nuestros poderes se depiertan los maestros nos enseñan a depender de nuestra magia pero para casos de suma emergencia tambien se nos es enseñado vagamente el control de nuestra energía vital, aunque este tema no es mas que unas dos o tres lecciones debido a que para los miembros de la familia real el llegar a usar tu energía vital es muestra de debilidad, falta de entrenamiento y poco poder. ¡¿Pero como iba a lograr sacar a Aurora ilesa si no hubiera utilizado mi energía vital?!

....

-Bienvenido joven principe, ¿Una habitación o dos?

-Gracias, solo una.

*Finalmente habíamos llegado al reino agua, este lugar es una isla pero las porciones de tierra eran realmente pocas, la isla media aproximadamente dos millones de kilometros al cuadrado, el detalle es que la isla era en forma de anillo, por lo que el porcentaje de tierra apenas era de un cuarenta por cierto, el otro sesenta era agua.

*En cuanto a los habitantes, eran unos seres en forma humana pero tenian branqueas en sus cuellos y su color de ojos son plateados te hace recordar mucho a los peces, su cabello casi siempre esta desaliñado, la mayoría de ellos siempre van delcalzos, solo las mujeres cubren sus pies con sandalias. Las mujeres aquí se podrían considerar hermosas pero en cuanto se entra al castillo de las sirenas ellas quedan como simples plebeyas cuando ambas son comparadas. En la tierra de la isla solo habitan los mercantes asi que hay bastante movimiento.

*El lugar en donde suelo quedarme cada vez que me veo en necesidad de venir es una casa grande esculpida de arena de mar y rocas. Los lugareños aqui poseen la magia de arena y agua por lo que es bastante común ver castillos de diferentes tamaños, me daba la impresión que los niños aquí gozaban mucho este ejercicio en sus clases de magia.

-Aquí tiene su llave principe.

-Gracias.

*Subí al cuarto con Aurora en mis brazos, al principio pensé en rentar dos cuartos pero considerando que esta es su primera vez afuera del reino de Lioss temí que quiciera escabullirse a conocer la isla sola asi que por prevensión mejor se quedará conmigo, ademas la belleza de Aurora era muy similar a la de las sirenas talvez incluso mas hermosa que ellas, sería peligroso que anduviera sola en este lugar.

*Antes de entrar en la habitación, vi a uno de los empleados del lugar llevando unas cubetas con varios trapos sucios en sus manos.

-Hey, ¿Cual es tu nombre?

*Él levantó su mirada, al reconocerme retrocedió dos pasos.

-Mi nombre es Zoru. ¿Que puedo hacer por el principe este día?

-¿Podrías traerme algo de fruta Zoru?

-Claro principe, pero ese es un cargo extra como podrá comprender...

-Claro.

*Saque tres monedas de oro, normalmente esto me alcanzaría para mucha comida de alta clase, pero en estas tierras era mejor ser generoso ya que nunca se sabe cuando necesitaras de la ayuda de cualquiera de ellos.

-Muchas gracias principe, en un momento regresare con su pedido.

-De acuerdo.

*Zoru dió un chasquido con su dedos y de pronto se convirtió en un charco de agua que rapidamente atravesó el suelo.

*El ver tan extraordinarios seres solo me hiso sentir un inquietante pesar.

...

-Hummm... ¿Donde... Donde estamos...?

-En el reino agua.

-¡¿Eh?! ¡¿Cuando llegamos?!

-Hace dos días. Debo admitir que me sorprende lo mucho que tardas en recuperarte.

-¡¿Dos días?!

-Si, por cierto come algo de fruta y aquí tienes el agua.

-¡Muchas gracias!

*La pobre debía estar muriendo de hambre porque comió la fruta como si fuera el manjar mas delicioso de todo el universo.

*Despues de un rato comiendo y bebiendo agua ella parecía haber recuperado por completo su energía.

-Principe...

-¿Si?

SLAM (SONIDO DE BOFETADA)

-¡¿Que te pasa?!

-¡No, esa es mi pregunta! ¡¿Que es lo que te pasa a tí?!

-¡Aurora no te entiedo!

-¡¿Porque me tocaste ese día en el oceano?!

- ¡...!

-¡¿Quien te piensas que soy?! ¡¿Cada vez que quieras usar mis poderes me vas a acosar?!

-No... Yo...

-¡¿Que derecho crees tener sobre mí para usarme de esa forma?!

-¡Aurora escuchame...!

*En cuanto ví que sus ojos comenzaban a ponerse color turquesa me dí cuenta que debía hacer algo.

-¡No te voy a...! ¡¿Hummm...?!

-Siento mucho tener que meter esta manzana a tu boca pero necesito que me escuches.

*Ella mordió la manzana, en cuanto comenzo a masticar sus ojos cambiaron a rosa, significa que aunque ya no estaba molesta seguía con la guardía alta.

-No es que planeé tocarte cada vez que quiera que te enojes, esa fue una situación de emergencia no de deseo.

*A penas había terminado de decir eso cuando pude sentir a alguien detras de la puerta. Hice una señal a Aurora para que guardara silencio. Luego fuí a abrir la puerta con mucha cautela.

-¿Que sucede Zoru?

-Principe, aquí le traje los libros que usted solicito. ¿Necesita algo mas de mi parte?

-No por ahora, pero quiero que vengas mañana por la mañana con mas fruta y agua.

-Por supuesto señor...

*Antes de que Zoru desapareciera Aurora se asomo por mi hombro para verlo, en cuanto él la vió pude notar algo diferente en su mirada.

-Ni se te ocurra hacerle nada a mi prometida.

-Disculpe mi imprudencia joven principe.

*Luego de eso chasqueo sus dedos y se fue.

-¡¿Que era eso...?!

-Es un Crión, asi se les conoce a los habitantes de esta area de la isla.

-¡¿Es un guerrero?!

-¿Porque preguntas eso?

-Él tambien poseé magía...

-No, es un simple trabajador.

-¡¿Como es posible que tenga magia?! ¡Espera...! ¡Tambien los piratas...! ¡Claramente el capitan de ellos era el mas poderoso pero todos ellos podían crear campos de protección...!

-Haizzz... Asi es. Como puedes ver afuera del reino de Lioss todos poseén magía.

-¡¿Porque en Lioss solo la familia real poseé poderes entonces?!

-Todo comenzó hace varios años... Las tierras eran una sola, todos dependían de todos ya que nadie poseía una magía en especifica, pero la ambición por obtener mas poder es algo que siempre caracterizo a los humanos. Hubo una rebelión en la que el aquel entonces gobernante quiso dividir las tierras a conveniencia propia, esto genero grandes disturbios, guerras y la paz se quebrantó por completo. Los dioses Zheus y Nemésis condenaron el comportamiento de todos pero favorecieron a sus favoritos. La diosa Nemésis bendijo con el mejor de los poderes a los reinos que habían tratado de calmar los disturbios, estos fueron: el reino del aire y el reino del agua. Mientras tanto Zheus protegio al reino de la nieve y parte del reino de la tierra otorgandole los poderes de la dominación completa del hielo y parte del agua a los ancestros de Lisbana, en cuanto a los pocos que salieron limpios de todo el disturbio perteneciente al reino de la tierra solo les dió un distintivo.

-¿Cual?

-Gigantes.

-¡¿Eh...?!

-Si.

-¡¿Que paso con los demas?!

-Al principio unicamente se dijo que los encerrarían en una porción de tierra...

-¡¿El reino de Lioss?!

-Si, pero cuando las cosas se habían puesto mal, hubo un hombre entre todos que durante la guerra salvo a uno de los hijos del reino de aire...

-¡¿Uno de los hijos del reino aire?!

-Si, el pequeño niño apenas pasaba de los 5 años, se escapó del cuidado de su madre porque había escuchado que su padre estaba en medio de la batalla muy mal herido. Pero en cuanto puso un pie en el campo de batalla alguien del reino de nieve intento asesinarlo, despues de todo en la batalla por la busqueda del poder, eran todos contra todos. Mi tatara abuelo logro cubrir a este pequeño antes de que fuera atravesado por una espada. La bondad de él hiso que la diosa Nemésis se apiadará de nosotros, asi que bendijo a mi abuelo con el poder del fuego azul, y lo nombró rey de Lioss apesar de eso no levanto el castigo de Zheus. En su lugar dijo que solo él o los predecesores a ese reino podían cruzar la barrera.

-¿Eso significa que...?

-Si, en estos momentos yo y mi padre somos los unicos que podemos salir y entrar al reino de Lioss, o al menos asi era hasta ese día en que te conocí.

-¿Dices que el reino de Lioss es el mas...?

-¡Shhhh....! ¡No hables tan fuerte por favor!

-Lo... Lo siento...

-Pero si, somos los mas debiles de todos los reinos debido a que somos los unicos seres a los que los dioses solo dieron poderes limitados.

-¡¿Como es que nadie sabe de eso?!

-Porque los dioses actúan por cuenta propia, los demas reinos al ver que todos sus habitantes fueron bendecidos con magia creyeron automaticamente que nosotros tambien lo habíamos sido y que nuestro unico castigo solo fue el quedarnos con pocas tierras, sin la posibilidad de salir para evitar futuros disturbios. Nadie sabe que solo los descendientes de aquel hombre que rescato a ese niño fue el unico bendecido con el poder de fuego azul.

-¿Entonces cuando sales a las negociaciones de todos los reinos...?

-Si, me veo en la necesidad de mentir para que nadie nos vea de menos ni seamos humillados por los demas.

-¿Oye... Crees que Lisbana pronto se vaya a enterar de eso y quiera conquistar Lioss?

-No lo creo. Despues de todo la barrera fue creada por el dios Zheus, nadie puede atrevesarla sin su permiso.

-¿Y que pasaría... Si él lo autoriza...?

-¿Porque lo haría?

-No lo sé... ¿Pero porque crees que no pudiste entrar por la barrera el otro día si él es el unico que autoriza las entradas y salidas?

-No sé, pero si sé que tú en algún punto te conectas con todo esto...

El principe parecia estar armando un enorme rompecabezas pero que sin importar cuantas piezas tratara de encajar ninguna tenía nada que ver con la otra.

-¿Cual es tu objetivo principe?

-¿Eh?

-Antes la mujer mariposa dijo que tenías un objetivo... ¿Cual es?

-Demostrarle a los dioses que no somos seres codiciosos y que somos dignos de confianza.

-¿Con que fin?

-Con el fin que ellos bendigan a toda nuestra nación con el fuego azul y asi no vivir con el temor de que un día seremos eliminados.

-Ya veo...

-Bien, ya que ya recuperaste tus energías y los malos entendidos fueron aclarados, llegó la hora de tu entrenamiento.

-¡¿Mi que?!

-Tu entrenamiento.