Cuando Cloeh y el principe volvieron ambos tenian sus mejillas ruborizadas, pero por alguna razón no daban la sensación de que se llevaran mal, por el contrario a partir de ese día ambos comenzaron a conversar mucho y se ayudaban mutuamente con los quehaceres de la casa, parecía que ambos estuvieran en la misma sintonía y aveces ella incluso lo defendía de Lizard algo que lo tenía de pesimo humor. -Oye Aurora... ¿Que piensas del principe? ¿Él te gusta? -¿Porque me preguntas eso Cloeh? -Bueno... Ella desvió su mirada rapidamente, la verdad es que a veces si me sentía molesta al ver la cercanía de ambos pero no creo que esto fuera como algo de amor ni nada por el estilo, si no mas bien por el hecho de que fue junto a él que comencé esta nueva aventura, él fue mi maestro por un buen tiemp